Con déficit de un mil millones de dólares, Aerolineas Argentinas pasará por reestructuración

Isela Costantini, presidente de Aerolíneas Argentinas, aseguró que la empresa está insostenible, que fue gestionada desde lo político y no desde lo administrativo. Actualmente emplea a 12.200 personas (muchas de ellas fantasmas y militantes), lo que es excesivo para una compañía aérea como Aerolíneas Argentinas. El déficit está calculado en 15 mil millones de pesos, siendo la mitad de esta cantidad deudas con proveedores como Boeing, Embraer y fabricantes de motores.

“Los números que estamos considerando son basados en los niveles de deuda, en las cartas de default de algunos proveedores. Considerando la deuda vencida de algunos años atrás y los resultados operativos, el número debería ser de 15 mil millones de pesos. Es un número absurdo. Es un número con que el presidente Macri no está de acuerdo y nosotros como gestión tampoco podemos imaginar de solicitar un nivel de subsidios de ese monto. Ya empezamos a trabajar para reducir el déficit de este año”, señaló.

La reestructuración

Con pérdidas diarias estimadas en 1 millón de pesos, la compañía cerrará destinos como Roma, Nueva York y Barcelona; dejará en tierra su flota de Airbus A340-300 y espera recortar hasta 1.200 empleados en unificación con Austral Líneas Aéreas, lo que llevaría a una redución en el número de empleados a través de renuncia voluntaria o jubilación. Costantini quiere dejar la empresa rentable en cuatro años.

Isela Costantini dice que, por ahora, no hará cambios en los vuelos hacia Brasil, a pesar de la crisis. “Brasil sigue siendo un destino importante, especialmente para el turismo argentino”, dice. Se sabe que en el mercado entre Brasil/Argentina, la estatal tiene una de las tasas de ocupación más bajas, resultado del intento de poner freno a competidores como LAN Argentina; recortes de frecuencias hacia el Brasil serán inevitables en un futuro próximo.