Joya, Nunca Charter: La difícil tarea de vender los Embraer 190AR

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La noticia se sigue repitiendo: los Embraer 190 se están yendo de a poco de las compañías que los operan. La necesidad de aviones más grandes, el salto de eficiencia en sus sucesores y los lógicos procesos de renovación de flota hacen que el 190 quede desfasado rápidamente de los planes de sus operadores.

Hace unos días Air Canada anunció que retiraba sus 26 EMB190 para hacer lugar a los Bombardier CS300. Virgin Australia retiró su último 190 hace poco más de un mes. En 2016, American Airlines tomó la decisión de retirar los 20 suyos, terminando en 2019. Jetblue, cliente de lanzamiento del modelo, pospuso su decisión al respecto, pero consideró seriamente abandonar al 190.

¿Es un avión malo? Para nada: lo que sí, es que su nivel de costos operativos es alto, y la capacidad hace que se divida entre pocos pasajeros. Por lo que un avión lleno no necesariamente implica que el vuelo sea rentable.

Los competidores en el segmento presionan para su salida, y uno de los principales enemigos está en casa: el E195 E2 se promociona como “the profit hunter” (cazador de ganancia) basado en la notable eficiencia de consumo y baja de sus costos de operación, sumado a 50 asientos adicionales.

En un mercado como el argentino, que busca expandirse y seguir creciendo, el 190 de Austral empieza a quedar afuera. No tanto por su capacidad, sino por la combinación de costos de operación y la necesidad de mantener el traslado de esos costos a los pasajes en la escala de lo razonable.

El problema es que, con tanto 190 saliendo al mercado, o mejor dicho yéndose a la baja, serán pocos los compradores de tal modelo. Más teniendo en cuenta la configuración de cabina de los de AU, que al ser de dos clases constituye una excepción en lo que a jets regionales como el 190 se refiere. Un posible interesado necesitará reconfigurar el interior, lo que elevará los costos de adquisición. O lo llevará a elegir otro.

De acuerdo a lo que pude hablar con gente del grupo Aerolíneas, la idea es que el futuro de la flota de Pingüinos de Austral esté ligado al contrato de su reemplazo. Entregarlos al oferente en parte de pago, y que quien provea del nuevo avión se encargue de reubicarlos. Me parece lo más lógico, porque será difícil salir a ofrecer 190, conseguir comprador, completar la operación y a partir de ahí iniciar la rueda con el constructor del reemplazo de los mismos. Más  si se quiere contar con 12 de los aviones nuevos para fines de este año.

A partir de la alianza Boeing-Embraer (mejor dicho, Joint Venture), que está cada vez más cerca, de las cuatro opciones que hablábamos antes (Boeing, Embraer, Airbus y Bombardier) hay dos (o una) que se imponen claramente. El 737-800 y el E195 E2 serán número puesto por la facilidad que encontrará el fabricante para agregar los 190 al portfolio de productos que ofrece, y la gente de Renton podrá disponer de su fuerza de ventas para presentar el 190 como una buena alternativa para algún actor del acotado segmento de los 100-seater.

Airbus y Bombardier quedarían más relegados en la carrera, por la dificultad de incorporar al 190 a su oferta. No es imposible, pero claramente es más difícil. Una pena, porque me encantaría ver a AU/AU operando el CS300, un avión que está dando excelentes resultados a sus operadores y que además incorpora nuevas tecnologías y ofrece un nivel de confort superior a sus pasajeros.

Iremos viendo para donde va la industria y el mercado; lo que sí, es que los días del Embraer 190 claramente están contados. Esperemos que los 190AR de Austral puedan encontrar un nuevo operador y no tengan destino de desierto tan rápido. 

Foto E190 Austral: Sebastían Fernández

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    By: Pablo Díaz

    40 años. Argentino. Casado.
    Profesional de IT por elección, Aeronáutico por vocación.
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    Viajero ocasional, nerd frecuente.

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