Abogado de Trump y exembajadora en la ONU, nominados para la junta directiva de El Al

Kanfei Nesharim, empresa de gestión de activos controlada por el estudiante de 27 años, Eli Rozenberg, que se convirtió en accionista mayoritario de El Al Israel Airlines en septiembre de este año, anunció el pasado miércoles, 7 de octubre, el nombre de seis candidatos a la junta directiva de la aerolínea de bandera israelí, además del nombre del presunto futuro presidente de la junta (chairman). Todos están sujetos a la aprobación de los demás accionistas, que se reunirán en noviembre para una junta general.

Entre los nominados se encuentran el abogado Jason Greenblatt, vicepresidente ejecutivo y director legal de Donald Trump y The Trump Organization. También, fue Asistente del Presidente y Representante Especial para Negociación Internacional; además, Gabriela Shalev, exembajadora israelí en Estados Unidos y en la Organización de las Naciones Unidas (ONU). El chairman propuesto fue David Brodet, exdirector del Ministerio de Finanzas de Israel y actual presidente de Bank Leumi, una de las más grandes e importante institución financiera israelí.

• También podría interesarte: El futuro de Jet Airways se decidirá esta semana; puede regresar a volar

Los demás nombres: Amikam Ben-Zvi, expresidente de la Institución de Normas de Israel (SII) y padre de la actual directora de gestión de riesgos de Bank Leumi; Doron Cohen, excoordinador de personal en la división de presupuesto del Ministerio de Finanzas de Israel y exdirector de la Autoridad Comercial Gubernamental; Moti Engelman, ejecutivo con experiencia en el sector aéreo; Reem Aminoach, director de UHY Shtainmetz Aminoach, general de brigada (reserva) de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) y esposo de la exdirectora ejecutiva de Bank Leumi.

Rozenberg, estudiante nuevayorquino de ascendencia israelí e hijo de un multimillonario estadounidense, se hizo conocido en todo el mundo el 18 de septiembre, cuando fue anunciado como el nuevo accionista mayoritario de la aerolínea, después de adquirir una participación del 42.85% por 150 millones de dólares. La compañía atraviesa una grave situación financiera y los demás accionistas se negaron a inyectar capital, lo que obligó al gobierno a intervenir para salvarla de una quiebra, obteniendo en contrapartida una participación del 15 por ciento. 

Ante la protesta de otros accionistas minoritarios, que acusaron al joven de ser el títere de su padre, la transacción fue aprobada y se convirtió en el número uno en control de El Al, con seis sillas en la junta directiva, suficiente para nombrar el chairman. Sin éxito, ha intentado dos veces adelantar la junta general para nombrar los nuevos directivos, sin embargo, los demás accionistas rechazaron las nuevas fechas, manteniendo la reunión según lo previsto, para mediados de noviembre.