Aeropuerto de Cuernavaca, un negocio de particulares
El mal denominado “Aeropuerto de Cuernavaca” que dicho sea de paso está localizado en el municipio de Temixco, se encuentra viviendo una de las peores crisis desde la llegada de la administración del actual gobernador perredista, Graco Luis Ramírez Garrido Abreu, quien a “dedazo” eligió a Federico Misael Álvarez Dávila, como Director General, un personaje que desconoce la industria de la aviación y que con su arrogancia y prepotencia ha impuesto reglas que laceran el sano crecimiento de la terminal.
Los pocos, pero necesarios negocios y las varias escuelas de vuelo que se encuentran dentro del aeropuerto han tenido que sufrir de la intimidación y el manejo a placeres del hoy en turno administrador de “papel” quien de forma deliberada y sin ningún fundamento legal quiere cobrar “piso” como si el aeropuerto ostentara una categoría como es el Aeropuerto Internacional de Acapulco.
Luego de la “modernización” de la terminal, anunciado con bombo y platillo se aseguraba el inicio de una nueva era, con el comienzo y la promesa de atraer más turismo, nuevas oportunidades de negocio y derrama económica, una etapa que hasta el momento no ha llegado.
Los caciques aeroportuarios como Álverez Dávila y Rafael Cuauhtemoc Alarcón Gómez, este último quien, es el actual comandante del aeropuerto no han sido capaces de ejecutar sus actividades por una desnutrida consciencia y conocimiento de la industria de la aeronáutica.
Con quizá primaria trunca, estos tóxicos individuos para la aviación nacional viven en un mundo oscuro bajo cobijo de los más corruptos placeres de uno de los gobernadores más odiados por la sociedad morelense y que se ha apoderado de riquezas ilícitas, difícilmente de comprobar, como sus tantas “empresas clandestinas” que suponen un lavado de activos, así como lo es esta empresa “Aeropuerto de Cuernavaca S.A de C.V”, que hasta el momento no sabemos de qué sobreviva, pues son las escuelas de vuelo las únicas que operan en el abandonado aeropuerto.
Por si fuera poco, hace dos días el comandante Cuauhtemoc, negó el acceso a varias aeronaves procedentes del aeropuerto de Atizapan, que llevaba en su interior ayuda humanitaria para las comunidades más afectadas del Estado, luego del sismo con epicentro de Axochiapan, Morelos del pasado 19 de septiembre. Varios pilotos les “valio madres” y aterrizaron en el aeropuerto. Efectivamente se trataba de ayuda y no de droga.
La orden de que no aterrizaran estas aeronaves -contra de todo principio de derecho del aire- obedecía a una supuesta incertidumbre, de que los vuelos no precisamente fueran para la ayuda al estado, si no, propiedad de bandas delincuenciales o de organizaciones de narcotráfico quienes aprovecharían estos momentos para transportar la droga.
Esto supone una falta de seguridad y protocolos exigidos por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) en su anexo 17, que pide que todos los aeropuertos estén protegidos por normas establecidas como el Aviation Security (AVSEC), que precisamente evita la intrusión de delincuencia organizada en las terminales.
Los pequeños criterios de las autoridades del aeropuerto hicieron arder las redes sociales y a los mismos voluntarios quienes desde temprano llegaron con sus propios automóviles para ayudarlos a transportar las toneladas de víveres a los diferentes centros de acopio y comunidades de la entidad.
A la escena, el jefe de mantenimiento Jaime Bahena Díaz, le pido a los voluntarios se retiraran porque apenas escasas “cajitas” había llegado y que no era necesaria tanta ayuda y que con la pena…. pero no los dejarían pasar.
Ni para aviación comercial, ejecutiva y ayuda humanitaria sirve este aeropuerto; y es que no se trata de su infraestructura –que si bien no es la mejor para un aeropuerto “internacional”-, si no, son sus mismos dueños quienes se han mostrado incapaces ante cualquier situación.
Quedan preguntas al aire e incómodas para quienes son los administradores de “papel” de la terminal, dejando al descubierto una vez más que México continúa teniendo “Aeropuertos Chafas” y “Comandantes y Administradores” que más que funcionarios públicos, parecen salidos de las cunas más mezquinas de sicariato.
Hasta que no tenga la etiqueta “@gracoramirez es el mecías” no saldrá ninguna ayuda a las comunidades tras el #sismo. pic.twitter.com/skNgt9UUgN
— RobertoMtzArmendáriz (@CapiBobby) 22 de septiembre de 2017
Así la energía en el aeropuerto de @AIC_Morelos el día de ayer, y las quejas ante las autoridades. pic.twitter.com/idsdvrAxY0
— RobertoMtzArmendáriz (@CapiBobby) 22 de septiembre de 2017
https://youtu.be/agpXRqJbzmg