Afganistán se queda sin control de tráfico aéreo

Hace un par de semanas cuando comenzamos a ver los horrores provocados por la salida de los estadounidenses de Afganistán y la subsecuente toma de poder por parte del Talibán, el grupo tribal dejo un punto muy claro al gobierno del Presidente Joe Biden, emitieron el ultimátum que solamente permitirían evacuaciones hasta el 31 de agosto.

El día de hoy 31 de agosto, el plazo se ha cumplido y el último avión  estadounidense salió la madrugada de ayer con el último soldado estadounidense a bordo quien dejó Afganistán en un Boeing C-17 Globemaster III partiendo en punto de la medianoche del Aeropuerto Internacional Hamid Karzai. Por primera vez en 20 años, no hay tropas estadounidenses en Afganistán. 

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La salida del ejército estadounidense crea una serie de complicaciones para el espacio aéreo de este país. Uno de los problemas más graves que la región tendrá que enfrentar es que el Aeropuerto de Kabul se ha quedado sin ningún tipo de Control de Tráfico Aéreo. El 16 de agosto, el lado civil del Aeropuerto fue cerrado mientras las multitudes violaban el área segura de la terminal y accedían a las pistas en un intento desesperado de escapar del país.

Esta zona fue reabierta dos días después, pero de manera muy limitada. Los vuelos de evacuación que operaron durante las pasadas dos semanas necesitaron llevarse a cabo bajo las reglas de vuelo visual (VFR) para poder aterrizar en Kabul. El Pentágono hizo uso de 18 aeronaves comerciales mediante el paraguas de la Flota de Reserva Civil (CRAF) durante este esfuerzo de evacuación. 4 de United Airlines, tres de American Airlines, tres de Delta Airlines, tres de Omni Air y tres de Atlas air, y por último uno de Hawaiian Airlines. 

El Talibán se encuentra actualmente en pláticas con gobiernos como los de Qatar y Turquía para intentar reiniciar las operaciones civiles desde Kabul. El Aeropuerto se encuentra actualmente en mal estado. Turquía fue el encargado de la seguridad dentro de las instalaciones por los pasados 6 años de acuerdo al plan trazado por la OTAN y comentan que bastantes reparaciones serán necesarias antes de que el aeropuerto pueda reabrir para su uso civil. 

La FAA le ha prohibido a operadores estadounidenses operar cualquier vuelo con procedencia o destino en Afganistán, asimismo se prohibió el sobrevuelo del país a cualquier nivel de vuelo. El espacio aéreo sobre Afganistán se encuentra sin control de ningún tipo. El último NOTAM para el FIR de OAKX/Kabul advierte que el tráfico sobrevolando debe proceder alrededor del país. El NOTAM dice lo siguiente:

Debido a la falta de CTA y la gran cantidad de actividad militante, los operadores estadounidenses están prohibidos de operar en el área del FIR del Aeropuerto OAKX/Kabul con excepciones muy limitadas. Los vuelos de y desde OAKX/Kabul no se encuentran ya exentos de esta prohibición. Las Aerovías P500 y G500 quedan habilitadas para sobrevuelos. Cualquier otra aeronave deseando entrar al espacio aéreo de Afganistán debe hacerlo con permiso del país y de la FAA, a menos que se encuentre experimentando una emergencia.”

Las autoridades de aviación civil de varios países occidentales, estuvieron prohibiendo operar sobre Afganistán por debajo de 25,000 pies, el motivo fue el riesgo que conlleva ingresar al área a causa de fuego directo e indirecto dirigido hacia los aeropuertos y los misiles tierra-aire los cuales ponen en peligro a los aviones de pasajeros. También hay riesgo de fuego por parte de las fuerzas armadas de países vecinos en caso de una mala identificación del avión en curso como un avión civil de pasajeros. 

Kam Air, la aerolínea privada más grande de Afganistán, en un intento de salvar su flota de las potenciales consecuencias durante la evacuación de Kabul, reubicó parte de su flota a Aeropuertos de países vecinos, pero principalmente en Irán. La aerolínea, quien el pasado 22 de febrero realizó su primer vuelo con una tripulación compuesta 100% por mujeres, dice que se mantiene comprometida con la gente de Afganistán y planea continuar operando de manera normal con este nuevo régimen controlado por el Talibán. Por el momento se encuentra aterrizada con un número no especificado de sus equipos fuera de Afganistán y en espera de nuevas relaciones bilaterales entre los países de la región y el gobierno Talibán.