Autoriza la FAA a Boeing reiniciar las entregas del 787 Dreamliner

La Administración Federal de Aviación (FAA), el regulador aeronáutico de los EE.UU., dio por fin su visto bueno al fabricante Boeing para reiniciar las entregas de su modelo Boeing 787 Dreamliner luego de más de un año de haberlas detenido, luego de encontrarse problemas en aviones recién fabricados y hasta no quedar satisfecha con las reparaciones y procedimientos del fabricante, para que no les pase otra vez lo del 737 MAX.

Se espera que Boeing reinicie las entregas a los clientes en los próximos días a los aviones que ya tienen las reparaciones y ya fueron inspeccionados para certificar que cumplen con los estándares establecidos.  Boeing tuvo que detener las entregas del avión desde mayo de 2021 aunque desde septiembre de 2020 estaban evaluando problemas con los aviones recién fabricados por fallas en las uniones del fuselaje trasero y otros problemas que fueron apareciendo.

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American Airlines será, al parecer, la aerolínea que reciba el primer avión desde que se detuvieron todas las entregas, si se da la autorización de entrega el lunes o martes, el próximo miércoles 10 de agosto American podría llevarse su primer avión a casa, aunque si en el proceso los inspectores de la FAA encuentran algo más, habrá un nuevo retraso. American señaló el mes pasado, durante la presentación de resultados del segundo trimestre, que esperaba recibir hasta 9 aviones Boeing 787 en lo que resta del año.

Por su parte, Boeing señaló que siguen trabajando de manera transparente con la FAA y sus clientes para el reinicio de entrega de los aviones. Apenas el mes pasado la FAA aprobó el plan de Boeing para la reparación de los aviones, y le presentó a la autoridad el primero de casi 120 aviones que tiene almacenados luego de un año de no poder realizar entregas.

La FAA afirmó nuevamente que inspeccionarán cada avión antes de emitir su certificado de aeronavegabilidad y dar la autorización de entrega. Normalmente la FAA delega a los fabricantes la emisión del certificado, pero ante los problemas recientes de Boeing, no solo con el Dreamliner, decidió retirarle la autorización hasta que quede satisfecha con el trabajo que la empresa está haciendo para cumplir con las reparaciones y especificaciones de sus aviones. La FAA había confiado también en Boeing acerca de la información para la certificación del 737 MAX, pero después de los accidentes y los problemas encontrados en la información que Boeing dio a la autoridad, la FAA está siendo muy estricta con la empresa.

Es importante destacar que la fábrica de Boeing en Carolina del Sur, en donde se fabrica el Boeing 787, ya había sido señalada por varios clientes por no cumplir cabalmente con las especificaciones del avión, algunas aerolíneas de hecho no querían aviones fabricados ahí, pero ante la drástica reducción de la producción Boeing no podía mantener dos líneas del 787 abiertas y decidió cerrar la de Everett, Washington, y dejar toda la producción en Carolina. Al parecer no solucionaron primero los problemas de calidad que se habían estado presentando.