Boeing 767 de United sufre falla hidráulica en Londres

El Boeing 767-300ER de United Airlines, matrícula N671UA, sufrió una falla hidráulica durante la carrera de despegue del Aeropuerto Internacional de Londres Heathrow (LHR) la mañana del pasado miércoles. Como resultado, la tripulación decidió abortar el despegue a alta velocidad, lo que provocó un sobrecalentamiento y daños en los frenos y las ruedas.

En el momento del incidente el avión se preparaba para cumplir el vuelo UA15 hacia el Aeropuerto Internacional de Newark Liberty (EWR); a las 10:57LT (GMT+1), el Boeing se alineó con el eje de pista e inició su carrera de despegue por la pista 27R (derecha), que dispone de 3,902 metros de longitud. Fue entonces cuando habrían recibido una indicación de falla hidráulica y, a alta velocidad, decidieron abortar el despegue. 

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Según dados de telemetría de FlightRadar24, el avión iba a una velocidad de 148 nudos (275 kilómetros por hora) cuando el despegue fue abortado. Después de abortar el despegue, la tripulación abandonó la pista activa y comenzó a rodar hacia una calle de rodaje (taxiway) paralela a pista, donde se detuvo. Los equipos de emergencia de la terminal fueron desplegados por la torre de control del aeródromo para enfriar los tren de aterrizaje del Boeing 767. 

Debido a la maniobra, que requiere frenos al máximo, se produce un sobrecalentamiento, lo que puede provocar un incendio en las ruedas. Según The Aviation Herald, a los pasajeros, el Capitán informó que había recibido una indicación de falla hidráulica y que, por lo tanto, había tomado la decisión de abortar el despegue. Según algunos pasajeros, permanecieron dentro del avión durante unas tres horas, mientras mecánicos del equipo de mantenimiento de la aerolínea en Heathrow realizaban una inspección para determinar si había o no condiciones para continuar el vuelo.

Los pasajeros fueron desembarcados sobre la calle de rodaje y trasladados en autobús a la terminal de pasajero y posteriormente el avión fue remolcado para una posición remota en la plataforma de la terminal; sufrió daños en los frenos y las ruedas. Los pasajeros fueron alojados en hoteles y horas más tarde reubicados en otros vuelos. Al día siguiente el Boeing 767 fue trasladado a Newark sin pasajeros cumpliendo el vuelo ferry UA2749 y aún permanece en tierra hasta la fecha.