CRJ de Endeavour golpea semiala en la pista durante aterrizaje en LaGuardia

El Bombardier CRJ900LR de Endeavor Air (Delta Connection), matrícula N146PQ, sufrió un incidente durante el aterrizaje en el Aeropuerto de Nueva York LaGuardia (LGA) la tarde del pasado sábado; el avión golpeó una de las semialas contra la superficie asfáltica de la pista (wing-tip strike). Este es el cuarto incidente similar que involucra a un avión Canadair Regional Jet (CRJ) de la compañía desde el año pasado.

En el momento del incidente el avión cumplía el vuelo DL5239 procedente del Aeropuerto Internacional de Cleveland Hopkins (CLE). Según The Aviation Herald, todo el vuelo se desarrolló con normalidad, hasta el momento de la aproximación y el aterrizaje en LaGuardia por la pista 04, que dispone de 2,134 metros de longitud. Fue entre la rotación (flare) y el toque en la pista a las 16:00LT (GMT-4) que el birreactor regional golpeó la semiala derecha contra la superficie asfáltica. 

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A pesar de lo ocurrido, el avión frenó y rodó con normalidad hasta una posición en la plataforma de la terminal para el desembarque de los pasajeros. Posteriormente, el avión fue inspeccionado y permaneció en tierra para reparaciones durante casi dos días (43 horas); fue regresado a las operaciones comerciales de la aerolínea la mañana del lunes, cumpliendo el vuelo DL5553 entre LaGuardia y Cincinnati (CVG).

Este fue el cuarto incidente similar registrado por Endeavour Air, que opera exclusivamente para Delta Connection. Según datos de The Aviation Herald, el primer incidente registrado fue el 18 de marzo del año pasado en Chattanooga; dos meses más tarde, en mayo, otro similar ocurrió en Detroit. Y el último se había registrado el 26 de diciembre, en Kalamazoo. El primer caso también involucró un CRJ900, mientras que los dos últimos, el CRJ200.

Todos los incidentes ciertamente fueron o están siendo investigados por la Administración Federal de Aviación (FAA), que clasificó lo sucedido en Kalamazoo como un accidente debido a la extensión de los daños también en la semiala derecha, que requirió una reparación más extensa y dejó la aeronave en tierra durante siete días. Pero uno de los factores que puede haber contribuido significativamente a todos estos incidentes es el viento cruzado durante el aterrizaje.