El Aeropuerto de Cuernavaca, entre la vida y la muerte

El Aeropuerto Internacional Mariano Matamoros (CVJ), mejor conocido como el Aeropuerto de Cuernavaca, ubicado en el centro de la República Mexicana, se encuentra entre la vida y la muerte desde que el Gobierno del Estado de Morelos, encabezado por el futbolista Cuauhtémoc Blanco Bravo, lo administra plenamente.

Y es que a pesar de su importancia para la conexión hacia varios destinos regionales del centro del país y su muy sonada (posible) actividad como una alternativa al congestionado Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México (AICM), no muestra signos positivos, sino todo lo contrario.

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Desde hace más de cuatro décadas cuando fue inaugurado el aeropuerto por el exgobernador Lauro Ortega Martínez, las administraciones gubernamentales no han sido capaces de impulsar el aeropuerto; se habla mucho, pero se hace poco y las aerolíneas comerciales que operaron en la terminal cerraron las cortinas al no tener muchos pasajeros, derivado de una pésima administración y falta de apoyo gubernamental.

Ahora en este año 2023, el aeropuerto que solo sirve para la formación de los futuros Pilotos Aviadores del país, no garantiza las mínimas condiciones de seguridad. Hace un par de semanas, la misma comandancia del aeropuerto quiso paralizar las operaciones del aeropuerto ya que no se contaba con la cantidad necesaria de personal de bomberos, clave para garantizar la seguridad.

Información recabada por Transponder 1200, los bomberos del Aeropuerto de Cuernavaca no cuentan con los equipos necesarios para su vital actividad; en entrevista exclusiva a uno de los bomberos perteneciente al Cuerpo de Salvamento y Extinsión de Incendios (SEI) y que prefirió mantener su anonimato, señaló que ninguno de los bomberos tiene Seguridad Social (IMSS), seguro de vida o seguro de riesgo de trabajo, además de que les pagan por honorarios, es decir, que el Gobierno del Estado de Morelos no los contempla como empleados, sino como prestadores de servicios.

No entiendo… hay más personal administrativo que operativo, ganando sueldo abismales, ¿para qué quieren tanto contador? Cuando literalmente el aeropuerto se está cayendo… estamos ahí solo para taparle el ojo al macho”.

Además, denunció la falta de apoyo y de herramientas necesarias para la actividad que desempeñan. No cuentan con el equipo necesario y con el que cuentan, se encuentra en mal estado. Las unidades desde hace más de tres años requieren mantenimiento y los extintores poco a poco se van terminando o están caducos, lo que hace difícil mantener la seguridad operacional del aeródromo.

Derivado de la situación y cuando Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) salió de la terminal recientemente, varios bomberos han renunciado debido a las deplorables condiciones de seguridad y que si les pasa algo, no tiene ninguna protección ni apoyo. Con tal de mantener el personal mínimo por cada turno, elementos de seguridad privada que, no tienen los conocimientos necesarios, los apoyan de buena voluntad.

Tampoco cuentan con las capacitaciones necesarios y obligatorias que por ley deben tener, el gobierno morelense no les proporciona cursos recurrentes (cada año), necesarios para su entrenamiento y posible atención de incidentes y accidentes en la aviación.

Desafortunadamente el Aeropuerto de Cuernavaca se encuentra en una situación preocupante y peligrosa para las operaciones aeronáuticas, mientras que el Gobierno del Estado lo ha dejado en el abandono y no existe un plan de inyección de capital. Los operadores que, en su mayoría son las escuelas de vuelo y bases fíjas de operaciones, piden a las autoridades urgentemente un plan de mantenimiento y garantías para la seguridad de los vuelos.