Envía el gobierno mexicano funcionarios a Washington para recuperar la Categoría 1

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En otra de esas acciones a las que no se les encuentra lógica a no ser que parezca que están haciendo algo, el presidente López Obrador anunció en su “mañanera” que este fin de semana partirán a Washington un grupo de funcionarios encabezados por alguien no especificado la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SITC) (recuerden que el Secretario Jorge Arganiz está enfermo y no está realizando sus funciones), para entrevistarse con funcionarios de la Administración Federal de Aviación (FAA) buscando que México regrese a Categoría 1.

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A veces parece increíble el nivel de ingenuidad que aparentan los gobernantes, las cosas no suceden porque lo diga el presidente, ni porque vayan “funcionarios” a entrevistarse con la autoridad de otro país. La degradación de México se dio porque la Agencia Federal de Aviación Civil de México (AFAC) demostró absoluta incompetencia e ineficacia para realizar sus funciones, principalmente la supervisión de las operaciones de aerolíneas y talleres de mantenimiento y otros prestadores de servicios aeronáuticos, para verificar que se cumpla con la reglamentación y estándares internacionales.

Es decir, no se trata de una “negociación” en donde se pretende llegar a un acuerdo, la FAA hizo la auditoría a nombre de la OACI además de suya propia para verificar que la autoridad mexicana esté cumpliendo con sus obligaciones bilaterales porque debe haber confianza mutua en lo que hacen. Y el resultado de la auditoría fue que la AFAC tiene demasiadas deficiencias y no cumple con sus funciones, por lo que se hicieron una serie de recomendaciones de lo que se necesitaba hacer para recuperar la Categoría 1.

Eso fue desde mayo de 2021, un año después la FAA hizo otra inspección y encontró más problemas que las supuestas soluciones que se presentaron a los que había, por lo que en lugar de que todo fuera mejorando, la AFAC va como los cangrejos. Para complicar más las cosas, luego del hackeo a documentos del gobierno por parte del grupo de hackers “Guacamaya”, la AFAC anunció que no recibirá ningún trámite a través de su portal y suspendió la entrega de licencias, con la afectación a diversas personas entre pilotos, sobrecargos y personal técnico, que no podrán realizar su trabajo por no tener sus licencias vigentes. ¡Justo lo que faltaba!

Tampoco se cuenta con los inspectores necesarios para las actividades de supervisión, ni se les incrementaron los sueldos como fue sugerido, ni siquiera hay viáticos para que puedan realizar sus funciones (ya saben, la mal entendida “austeridad franciscana”).

Ante este panorama, ¿cómo pretenden las autoridades mexicanas convencer a la FAA acerca de la Categoría 1 si la AFAC está muy lejos de cumplir con todas las funciones que se señalaron como deficientes? ¿Qué creen que pueden ofrecer por la Categoría 1? ¿Promesas de mejora? ¿La cabeza de otro funcionario?

No sé a qué cree la “4T” que juega a nivel internacional, dentro del país pueden tener funcionarios ineptos que cumplan con el 80% lealtad y 20% preparación, cometiendo errores en sus funciones; pero cuando esto se pasa a un tema internacional tan delicado como la aviación, no puede haber pretextos ni “negociaciones” con las autoridades, mucho menos amenazas de la presidencia con publicar los ingresos de las autoridades extranjeras que no los apoyan. O se cumple con las funciones o se atienen a las consecuencias. Y hasta ahora la AFAC sigue sin cumplir.

Así que mandar un grupo de funcionarios a Washington a mendigar el cambio de categoría es realmente de pena ajena. Los esfuerzos se deberían estar haciendo para superar los problemas, no para ver si “convencen” a las otras autoridades de que les “den chance” porque se está afectando a las aerolíneas nacionales.

Las aerolíneas mexicanas, las más afectadas

Y vaya que los han afectado, porque mientras México siga en Categoría 2 no pueden incrementar rutas y vuelos hacia EE.UU., que es el principal mercado extranjero de manera natural; no pueden cambiar los aviones que usan para sus vuelos, ni siquiera utilizar los más nuevos porque no estaban registrados ante la FAA antes de la degradación (sí, es absurdo, pero así está la reglamentación en donde la ley sí es la ley); tampoco pueden realizar vuelos en código compartido con aerolíneas estadounidenses ni hacer alianzas. Y las aerolíneas mexicanas no fueron las responsables de la degradación del país, ellos sí han cumplido cabalmente con todas las exigencias para volar a diversos países extranjeros. Los daños a las aerolíneas mexicanas por la degradación se calculan en más de $400 millones de dólares en ventas no realizadas por no poder ofrecer todos los vuelos que quisieran.

Así que se puede esperar un “no” de parte de la FAA hasta que la AFAC cumpla con todo lo que tiene que cumplir. De acuerdo con las aerolíneas nacionales, considerando el avance que se tiene con la AFAC, esperan que esto se pueda dar hacia mediados del próximo año si es que no encuentran más deficiencias en la siguiente inspección. Con todos los problemas y consecuencias que esto les trae.

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Ya hemos comentado que en el sexenio de Felipe Calderón sucedió lo mismo con la entonces Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), México fue degradado a Categoría 2 pero de inmediato se tomaron acciones para resolver los problemas y en poco más de 6 meses México ya había recuperado la Categoría 1. Ahora vamos para 2 años y a ver si para entonces logran resolverlos para que México regrese a Categoría 1, pero todavía está por verse.

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    By: Erick Haw Mayer

    Apasionado de la aviación y la industria automotriz de toda la vida, tiene una Licenciatura en Informática y un Postgrado en Comunicación y R.P. Aunque tiene experiencia en empresas del rubro automotriz y en Mexicana de Aviación, su vida profesional se ha dedicado más al periodismo especializado en todo tipo de medios impresos y electrónicos, incluyendo la revista Avión Revue de Latinoamérica.

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