México cumple un año degradado a Categoría 2 por la FAA
Se cumple ya un año en que México fue degradado a Categoría 2 por parte de la Administración Federal de Aviación (FAA) de EE.UU., que luego de hacer una auditoría a la autoridad mexicana, la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC), a nombre de la OACI (Organización de Aviación Civil Internacional) determinó que tenía demasiadas deficiencias para dar un seguimiento oportuno a las empresas y operaciones aéreas del país, y por lo tanto no era digna de confianza.
Al hacer la degradación de Categoría 1 a Categoría 2, las aerolíneas del país están imposibilitadas de tener acuerdos comerciales con empresas estadounidenses y no pueden incrementar sus rutas, vuelos o cambiar los equipos registrados para operarlos, en tanto el país no recupere la Categoría 1.
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El presidente López Obrador negó la realidad diciendo que no era algo grave, que no afectaba a las aerolíneas y que era por los intereses de las empresas norteamericanas. Y dijo además que en “unos meses” México recuperaría su nivel. Pero nada de eso es siquiera cercano a la realidad.
La degradación no es obra de la casualidad ni de intereses extranjeros, como quieren hacer creer; es porque la autoridad de aviación civil del país no cumple con la normatividad y estándares de la OACI, así como en la supervisión de las operaciones aéreas del país, que las empresas cumplan también con toda la normatividad requerida, y que las licencias para todo tipo de personal que la requiera, se tramiten de acuerdo a lo establecido por la OACI en seguridad operacional.
Las deficiencias de la AFAC
Pero de acuerdo con la auditoría realizada por la FAA a la AFAC durante varios meses, se detectaron 28 deficiencias en 4 áreas generales críticas para la seguridad aérea, principalmente la falta de personal suficiente y capacitado para realizar las tareas de inspección en empresas de aviación, personal de tierra y vuelo, exámenes y licencias, así como talleres de mantenimiento. Ante tal situación no tuvieron más remedio que declarar la degradación del país a Categoría 2 en tanto no se subsanen todas las deficiencias encontradas.
Cuando en 2010 se tuvo una situación similar por responsabilidad del entonces Secretario de Comunicaciones y Transportes, Francisco Molinar Horcasitas, quien sabiendo de la auditoría no hizo por poner las cosas en orden, el entonces presidente Felipe Calderón dio instrucciones de realizar de inmediato todo lo necesario para recuperar la Categoría 1, y el nivel se logró nuevamente en tan solo 6 meses. En ese lapso, la degradación fue la puntilla para llevar a la quiebra a Mexicana de Aviación con todas las consecuencias que ya conocemos.
Ahora ya llevamos un año y todavía no se ve con claridad para cuándo se recuperará la Categoría 1, todo son promesas y habladurías del gobierno actual. No solo del presidente, también el Secretario Ebrard dijo desde agosto pasado que para el primer semestre de este año se recuperaría la Categoría 1, pero las apuestas ahora son que, si todo sale bien, quizá para fin de año.
Pero el problema no sucedió de pronto en mayo del año pasado, desde octubre de 2020 se inició la auditoría de la FAA de la que ya se sabía que se iba a realizar, pero los funcionarios de esta administración no hicieron nada, como es su costumbre, a pesar de conocer las deficiencias. Sumado a ello, los empleados de estas áreas tenían graves deficiencias e hicieron un grave daño en lugares en donde la preparación, conocimientos y experiencia son indispensables, como en la operación aérea.
Para complicar más el panorama, en diciembre de 2020 renunció Rodrigo Vásquez Colmenares como director general de la AFAC, dejando sin cabeza a la institución en auditoría hasta febrero del 2021, en que fue nombrado el General Carlos Rodríguez Murgía como nuevo director. Nunca se dieron a conocer las razones por las que Vásquez Colmenares tomó la decisión de renunciar a su cargo.
México nuevamente degradado a Categoría 2
Así llegamos a mayo de 2021 en que se dio la degradación junto con una lista de todo lo que debía hacerse y mejorarse para poder recuperar la Categoría 1. A partir de entonces ha habido reuniones y visitas con funcionarios de la FAA para revisar los avances, pero en ninguna de estas reuniones hasta la fecha se ha hablado de considerar una recategorización, lo que indica que las cosas siguen sin arreglarse del todo en la autoridad mexicana.
Para octubre de 2021, Carlos Morán que estaba en la SICT, declaró que ya se habían invertido $150 millones de pesos para la recuperación de la Categoría 1, pero al mismo tiempo hubo denuncias de robo de exámenes del CIAAC así como irregularidades para la obtención de licencias de pilotos y otros, que obviamente siguen perjudicando en cómo ven al país los externos.
El principal problema detectado en la AFAC es que, a la llegada del nuevo gobierno, los nuevos funcionarios hicieron renunciar a mucha gente operativa incluyendo inspectores, que además estaban muy mal pagados para su responsabilidad, de acuerdo con la FAA. Esto hizo que no tuvieran la capacidad de supervisión que indica la OACI sobre empresas y operaciones, lo que llevó inexorablemente a la degradación. En este tiempo, supuestamente, se han contratado ya a los inspectores requeridos, habrá que ver si son suficientes, si tienen la experiencia y capacitación adecuada para desempeñar su trabajo y si les están pagando bien, o los van a perder otra vez a la primera oportunidad que tengan de trabajar en otro lugar.
Los más afectados
Las aerolíneas que el presidente dijo que no saldrían afectadas, por supuesto que lo han sido y mucho, nada más con $200 millones de dólares. Todas cumplen con todas las normatividades locales e internacionales para poder realizar vuelos internacionales, sin embargo, son las más afectadas por la degradación del país, ya que no pueden solicitar nuevas rutas, frecuencias o cambios hacia Estados Unidos, que es el principal mercado internacional, lo que ha ocasionado que pierdan millones de dólares en ingresos no percibidos por no poder crecer en el mercado más importante. El turismo hacia México no sólo se recuperó, sino que es ya superior al que se tenía en 2019, sobre todo a playas como Cancún y la Riviera Maya, Los Cabos, Puerto Vallarta, etc., pero han sido las aerolíneas extranjeras las que han tomado todo ese mercado ante la imposibilidad de las aerolíneas mexicanas de competir al menos por una rebanada del pastel.
En lo que va de este año ha habido revisiones de avance con la FAA en febrero, marzo y mayo, se tenía programada otra más el 23 de mayo que fue pospuesta por “algunas semanas” por la autoridad estadounidense. No hubo más explicaciones.
Esperanza de recuperar la Categoría 1 este año
Pero mientras se tienen más reuniones de avance y que realmente se logren solucionar los problemas detectados, México sigue clasificado como un país que incumple con los protocolos de seguridad en aviación establecidos por la OACI, y la AFAC no tiene credibilidad como autoridad. Por eso no puede certificar el AIFA que fue certificado por decreto por aquello de que los gobiernos pueden dar la certificación de un aeropuerto sin necesidad de inspecciones de organismos internacionales. Pero por esa razón ninguna aerolínea internacional está interesada en operar desde ese aeropuerto, además de la falta de conectividad y transporte para llegar o salir.
¿Cuánto más va a durar esto? Es difícil saberlo porque no hay información sobre los avances que ha hecho la AFAC, solo lo que nos podemos enterar “de rebote”. Pero si la FAA no ha hablado todavía de un cambio en la categoría es porque todavía hay cosas pendientes de realizar. Los funcionarios dicen que, a más tardar, será a fin de año, pero su credibilidad es tan mala como la de la AFAC. Esperemos que así sea por el bien de nuestras aerolíneas, pero nada nos asegura que se logre.
Y aunque así sea, un año medio degradado por la incapacidad del gobierno en turno ha sido demasiado.