Piloto de PIA despegó sin autorización del Aeropuerto de Kabul

El pasado 15 de agosto, justo cuando el grupo de extremistas talibanes ingresaba a Kabul, en Afganistán, el Capitán de un vuelo de Pakistan International Airlines (PIA) aterrizaba en el aeropuerto de la ciudad. El vuelo PK6252, operado por un Airbus A320, con el comandante Maqsood Bajrani, aterrizó en el Aeropuerto de Kabul a las 10 de la mañana con la misión de sacar ciudadanos pakistanís y líderes afganos para llevarlos a Islamabad a salvo. Además del A320 había en el aeropuerto un Boeing 777 de PIA por la misma razón.

En una entrevista posterior para el Independent Urdu News, el piloto dijo que la situación era normal cuando aterrizó en el aeropuerto y que había varias líneas operando como de costumbre. Sin embargo, las cosas comenzaron a cambiar rápidamente. Luego de que los pasajeros abordaron ambos aviones de PIA, se permitió al Boeing 777 la salida y el despegue, por lo que emprendió su viaje a Islamabad.

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Pero minutos después, cuando el comandante Bajrani estaba listo para iniciar su vuelo con 170 pasajeros, se recibió un mensaje de la torre de control del aeropuerto de que los controladores habían dejado de operar y que nadie más podría salir a partir de ese momento.

De momento pensó que la torre volvería pronto al servicio activo, pero sospechaba que algo no estaba bien. Se puso en contacto con el equipo de PIA en Pakistán y pidió más información de lo que estaba pasando en Kabul. Cuando le comentaron sobre el avance de los talibanes en Kabul, él y su equipo se pusieron más aprensivos, sobre todo dada la cantidad de helicópteros que aterrizaban y despegaban sin detenerse.

Toma de decisiones rápidas

Poco después vieron a una gran cantidad de gente que venía de todas las direcciones y el caos comenzó a formarse en el aeropuerto, pensó en la seguridad de los pasajeros, la tripulación y del avión, y tuvo que tomar una decisión sobre qué hacer. Intentó ponerse en contacto con la torre de control, pero no hubo respuesta. La confusión en la plataforma del aeropuerto continuaba al igual que la tensión a bordo de su avión. Así que finalmente actuó asumiendo la responsabilidad de lo que hizo. Como explicó después:

Temí que nuestro avión fuera secuestrado y que la tripulación y pasajeros fueran rehenes de los talibanes. Consulté a mi compañero piloto y les dije a los pasajeros que tomaran asiento. Encendimos los motores y comenzamos a movernos a la pista. Al llegar a la cabecera, teniendo espacio, iniciamos el despegue. Teníamos que salvar el avión”.

Al llegar a unos 5000 pies de altitud, el avión de PIA hizo contacto con el Centro de Control de Doha, desde donde comenzó a recibir instrucciones para el ascenso antes de emprender la ruta hacia Islamabad. Horas después, ya en Pakistán, el comandante Bajrani vio que su decisión fue la correcta, ya que el aeropuerto estaba tomado por un caos incontrolable y no hubiera sido posible ya salir.

Sí, es cierto que violó normas internacionales, pero en situaciones de emergencia hay que tomar las decisiones rápidamente. No había controladores ni permiso de salida, pero técnicamente tampoco había una orden que lo impidiera, por lo que salió de Kabul con los sus pasajeros y avión sanos y salvos.