Pilotos de prueba de la EASA vuela por primera vez el MC-21-300
A principios del mes de febrero dos aviones de prueba Irkut MC-21-300, fueron sometidos por primera vez a ensayos donde se incluyeron pilotos de pruebas de la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA), completando con éxito las primeras sesiones en busca de la certificación.
Según United Aircraft Corporation (UAC) estas primeras pruebas se centraron en el comportamiento, modos de vuelo, incluidos excesivos ángulos de ataque hasta lograr un desplome controlado de los MC-21-300 de prueba. La duración de los vuelos fue de 2 horas 50 minutos y 4 horas respectivamente, volando entre 10 a 30 mil pies de altitud.
La integración de la EASA a estas pruebas es un excelente comienzo para la certificación europea, al tiempo de otorgándole una madurez relevante y demostrar que el avión ruso merece tener un lugar importante dentro de la férrea competencia de aviones narrowbody en el mundo.
- También podría interesarte: Emirates realiza un pedido de 40 A330neo y 30 A350; reduce órdenes del A380
La tripulación también incluyó ingenieros de pruebas de Rusia y EASA para analizar los parámetros de vuelo. Los pilotos de la EASA fueron sometidos a un adiestramiento del equipo, tanto teórico y práctico durante el pasado mes de noviembre.
El cliente de lanzamiento del nuevo avión ruso de nueva generación, será la compañía Aeroflot que al día de hoy tiene un pedido por 50 equipos. Hasta la fecha los dos aviones de pruebas han realizado alrededor de 122 vuelos y se espera completar esta primera certificación durante la segunda mitad del 2020. A pesar de un ligero retraso, el primer avión podría ser entregado a finales de este 2019 a la aerolínea Aeroflot.
El MC-21-300, es un avión ruso de nueva generación que tendrá una capacidad entre los 163 a 211 pasajeros en sus dos variante. El motores que impulsarán a la aeronave se podrán tratar de los PW1400G de Pratt & Whitney y también los PD-14 de United Engine Corporation (Russia). El pasado 28 de abril 2018 salió el MC-21 de la línea de montaje final en la fábrica de Irkutsk, Siberia.
Foto: flickr – Dmitry Terekhov