Sentencian a sobrecargo de United con identidad falsa

En enero pasado les compartimos la historia de un sobrecargo de United Airlines de origen brasileño, que llevaba más de 20 años viviendo y trabajando en EE.UU., con una identidad falsa, tomada de un niño que falleció en 1979 a los 4 años. No pretendía hacer nada malo, solo cumplir su sueño porque en Brasil no le daban el trabajo. Pero en la última renovación de su pasaporte algo llamó la atención de las autoridades que investigaron más y lo descubrieron, por lo que fue arrestado en el Aeropuerto de Houston (IAH).

Ricardo César Guedes fue arrestado en septiembre pasado y admitió en la corte de Texas que no era William Ericson Ladd, aunque llevaba más de 20 años trabajando en United bajo esa identidad. De hecho, gracias a ella obtuvo seguro social, pasaporte, trabajo, créditos, autos de lujo y una casa cerca de Lake Houston. Incluso se casó y apoyó a su consorte para obtener la nacionalidad. También se declaró culpable de declaraciones falsas en la solicitud de su pasaporte y hacerse pasar por un ciudadano estadounidense.

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Así que esta semana el Juez de la Corte de Distrito, George C. Hanks Jr., lo sentenció al tiempo que ya había permanecido en custodia (7 meses) así como a un año de libertad condicional, luego del cual enfrentará la deportación. Sin embargo, en la audiencia el juez dijo que estaba seguro de que Guedes tenía remordimientos por su conducta y lo considera “un buen hombre que cometió un error trágico para cumplir su sueño”. También se le ordenó a Guedes acudir a un tratamiento de salud mental y tomar cualquier medicamento prescrito por los médicos.

La sentencia bien podría parecer un tanto indulgente, pero como Guedes no tenía ningún antecedente criminal y tenía un trabajo estable en EE.UU., fueron mitigantes en su caso.

Pero, aunque admitió sus crímenes, defendió sus acciones como perseguir sus sueños de infancia de ser tripulante de cabina, le dijo al juez que fue rechazado por las aerolíneas brasileñas porque ya tenía demasiada edad y no era guapo. Su abogado arguyó que fue un “crimen de desesperación” y que Guedes nunca utilizó su identidad falsa para actividades criminales.

Guedes terminó diciendo que todo fue por perseguir la carrera que había elegido y que lamentaba lo que hizo porque sabía que no era correcto. Cuando fue arrestado en septiembre comentó que “tenía un sueño y el sueño había terminado”.

Las autoridades norteamericanas deberían reconocerle también que hizo un excelente trabajo al haberlos engañado por más de 20 años, sobre todo después del 9/11 en que se reforzó la seguridad en todas partes, pero principalmente en aeropuertos y la industria aérea. Veremos si logra convencer a las autoridades de no deportarlo dentro de un año e incluso de obtener su residencia legal que le permitiría seguir trabajando. Déjanos tu opinión en la caja de comentarios.

Foto Boeing 777 United: flickr – Tomás Del Coro