Tras presión política, Aeroflot recupera A330-300 incautado en Sri Lanka

Despegó del Aeropuerto Internacional de Colombo Bandaranaike (CMB) en Sri Lanka la tarde de este lunes el Airbus A330-300 de la aerolínea estatal y de bandera rusa Aeroflot, matrícula RA-73702, que había sido incautado por las autoridades cingalesas la semana pasada a pedido de la irlandesa Celestial Aviation. Según la prensa del país, la decisión de devolverlo ocurrió tras la presión política de Moscú sobre el gobierno de Sri Lanka, que depende de importación del petróleo ruso.

El avión despegó de Colombo hacia el Aeropuerto Internacional de Moscú-Sheremétievo (SVO) a las 18:21LT (GMT+5:30) cumpliendo el vuelo ferry SU569. El despegue se produjo poco después de que un tribunal del país revocara la decisión a favor de Celestial Aviation, dueña del A330-300; el avión había sido incautado el pasado miércoles por orden de la Fiscalía General de Sri Lanka a raíz de una demanda presentada por la irlandesa solicitando la recuperación del activo.

• También podría interesarte: Aeroflot suspende vuelos a Sri Lanka y pide devolución de avión incautado

Como protesta, el sábado, la aerolínea estatal rusa decidió suspender indefinidamente todos los vuelos desde y hacia Sri Lanka e instó al gobierno cingalés devolver el avión, aunque la justicia del país dictaminó que el A330-300 debía permanecer en tierra por lo menos hasta el 16 de junio, cuando se juzgaría la demanda interpuesta por Celestial Aviation. Sin embargo, mientras tanto, la presión de Moscú se impuso y el gobierno decidió devolverlo.

El motivo de la decisión del juez fue que Aeroflot aparentemente no recibió una medida cautelar que acreditara la prohibición de salida del avión del país. Además, según los políticos de Sri Lanka, país asiático que actualmente atraviesa una fuerte crisis social, política y económica, la decisión de incautar el avión que resultó en la suspensión de vuelos de Aeroflot a la capital Colombo podría impactar en el sector turístico y la conectividad aérea. 

Pero según medios locales, el factor de la presión de Moscú sobre el gobierno de Sri Lanka que pesó en la decisión fue el petróleo. Como publicamos hace unos días, el país incumplió el pago de la deuda externa y como depende de la importación de bienes, como el combustible, enfrenta una grave escasez hasta de turbosina en los aeropuertos. Sin crédito, el país recurrió a Rusia, comprando millones de barriles de petróleo para reactivar su única refinería; y ante la crisis con Aeroflot, el gobierno ruso podría revertir la decisión y suspender la entrega de petróleo al país asiático.