Turkish Airlines busca retrasar las entregas de sus Airbus A350 XWB

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Actualmente la demanda de vuelos comerciales es casi nula, esta es una situación que ha afectado a casi todas las aerolíneas del mundo, todo causado por la pandemia del Coronavirus (COVID-19), analistas especializados de Turkish Airlines han planteado que la recuperación tardará por lo menos cinco años, es por esta razón que las aerolíneas buscan formas para poder reducir sus gastos.

En estos meses hemos visto como las aerolíneas eliminan sus pedidos de aviones nuevos o algunos buscan retrasar sus entregas, esto es precisamente lo que está buscando Turkish Airlines, actualmente mantiene un pedido por 25 Airbus A350-900, de estas aeronaves una ya está construida y será entregada según los planes originales.

Los otros 24 aviones serán retrasadas sus entregas, así lo dio a conocer el presidente de Turkish Airlines, İlker Aycı, a medios locales, confirmando que su primer A350-900 si será recibido. También mencionó que actualmente se encuentran en negociaciones con el fabricante europeo Airbus sobre cuándo se entregarán los 24 pedidos restantes.

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Aycı también mencionó que se encuentra en pláticas con el fabricante norteamericano Boeing, para retrasar las entregas de catorce 787 Dreamliner que no han sido entregados a Turkish Airlines. Por otra parte mencionó que se encuentran analizando una posible expansión en su flota de carga, pues actualmente hay una alta demanda en este tipo de vuelos.

Este 1 de junio Turkish Airlines comenzó con servicios domésticos limitados, volando diariamente a Izmir, Antalya, Ankara Esenboga y Trabzon desde el Aeropuerto Internacional de Estambul. La aerolínea está confiada que las operaciones aumentarán gradualmente, hasta poder llegar a una capacidad nacional del 60% a finales de junio, siempre y cuando la demanda así lo permita.

Los servicios internacionales comenzarán hasta el próximo 10 de junio, Aycı anunció que según los analistas de la aerolínea, el impacto del coronavirus podría durar hasta cinco años. Además mencionó que el dejar el asiento de en medio vacío es “inaplicable e insostenible”.