Vladimir Putin firma ley que hace rusos los aviones arrendados
Finalmente, el presidente ruso Vladimir Putin firmó la ley por la que los aviones arrendados a empresas extranjeras pueden ser registrados como propiedad de las aerolíneas que los operan; esto en franca contraofensiva al estrangulamiento de la economía rusa por parte de muchos países del mundo.
De la flota actual que hay en la Federación Rusa que use calcula en 980 aviones, 777 son arrendados a largo plazo y de ellos 515 son arrendados a empresas extranjeras de leasing. A las empresas de arrendamiento, los países que impusieron las sanciones contra Rusia les dieron hasta el 28 de marzo para terminar sus contratos con las aerolíneas rusas y retirar sus aviones, pero las compañías aéreas los han estado evadiendo y no se ha devuelto ninguno. Con la aprobación de esta ley el gobierno ruso ahora las protege de hacerlo en perjuicio de las empresas extranjeras. Claro que a la larga afectará a las aerolíneas rusas porque cuando se supere el problema de la guerra nadie va a querer trabajar de nuevo con ellas o tendrán condiciones muy diferentes a las actuales.
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Por si fuera poco, la ley establece que los contratos ahora serán en rublos y no en dólares, en perjuicio adicional de los arrendadores, y si alguna empresa quiere terminar un contrato será un comité del gobierno ruso el que determine si el avión se devuelve o no.
Desde la invasión de Rusia a Ucrania y por efecto de las sanciones económicas que se le han impuesto al país, el rublo se ha depreciado un 30% contra el dólar, y además a Rusia se le excluyó del sistema SWIFT, por lo que ahora es muy difícil realizar transacciones financieras desde y hacia Rusia, lo que ha dificultado mucho a las aerolíneas realizar los pagos por los arrendamientos.
Por los acuerdos firmados en la Convención de Ciudad del Cabo, de los que Rusia es parte firmante, si una arrendadora da por terminado un contrato por alguna razón, el arrendador tiene la obligación inmediata de devolver el avión, lo cual no ha sucedido porque Rusia argumenta que las sanciones son “injustificadas”.
Además, las sanciones también le impiden a Rusia adquirir aviones y partes, por lo que es cuestión de tiempo que su flota comience a quedarse en tierra por falta de partes para mantenerlos en buen estado. Además, las aerolíneas cancelaron todos los vuelos internacionales para que los aviones no puedan ser confiscados al llegar a otro país.
Así que, si ya era complicado el panorama para los arrendadores, la nueva ley firmada por Putin hace mucho más complicada la situación, ya que difícilmente podrán recuperar sus aviones a corto plazo. Además, esto va a disparar los reclamos en la corte entre los arrendadores y las aseguradoras sobre los pagos de los aviones, ya que estas últimas consideran las acciones como “tiempos de guerra” y por lo tanto no van a querer pagar.