XB-MZN, preguntas dolorosas…

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A tres semanas de la desaparición de la aeronave Cessna C152 de la Escuela de Aviación México, me permito recordar aquella plática que tuvimos aquí en octubre del año pasado: “El agotado modelo educativo de la escuela de vuelo tradicional”, del cual me permito extraer los siguientes párrafos:

Es del modelo educativo aeronáutico tradicional y de la presente reglamentación que, al ser estricta, no permite ir modificando a las necesidades actuales, tanto la pedagogía como el proceso de enseñanza y aprendizaje.”

No sólo es la tecnología, sino el cómo los instructores están siendo capacitados para adaptarse al CRM, procedimientos de operación, inglés técnico aeronáutico, navegación satelital, vuelo EFIS y factores humanos.”

No debemos esperar a pagar las consecuencias de una mala impartición de clases o la influencia de un mal instructor que no fue capacitado correctamente por su empleador, es decir, la escuela de vuelo, porque al final de cuentas, la carrera de Piloto Comercial es una inversión muy fuerte que rebasa los 500 mil pesos y que, en muchos de los casos, cuesta a las familias un esfuerzo gigante para no ver retorno de inversión en formación y buen empleo. Responsabilidad social pues.”

De este último párrafo no pretendo, bajo ninguna circunstancia concluir NADA acerca del piloto instructor en la aeronave incidentada.

Pero si me permito preguntarles a Ustedes ¿qué opinión les merece el que algunas escuelas de vuelo no puedan retener a sus instructores ya sea por las malas condiciones salariales, excesivas horas de jornada, escasa (o nula) capacitación continua (on the job training) y ahora, el hecho de que se han abierto tantas oportunidades en las diferentes aerolíneas, que ya no es rentable seguir siendo piloto formador/capacitador/instructor en algunas escuelas de vuelo?

¿No repercute todo, o parte de lo anterior, en la baja observancia de la seguridad en algunas escuelas de vuelo?

¿No tiene nada que ver la premura por “fabricar” pilotos para satisfacer la demanda de las aerolíneas comerciales?

¿Influye de manera negativa esta “carrera contra el tiempo” para sacar el producto terminado (piloto) al mercado laboral?

¿Vale la pena arriesgar la seguridad de los tripulantes en aras de mantener un nombre o un prestigio en el ambiente aeronáutico?

¿Hasta dónde podemos exigir el que una escuela de vuelo invierta en aeronaves más modernas, mejo mantenidas, con mejor instrumentación, formadores-instructores más preparados y en constante entrenamiento y de esa manera no añadir eslabones en la cadena del error?

Esperemos que se encuentren ya a los Colegas incidentados en la aeronave XB- MZN y que la autoridad aeronáutica nos permita conocer los pormenores del (hasta ahora) incidente; nunca por el morbo, sino por la necesidad de estudiar estos eventos a manera de que no vuelvan a suceder.

Al final, es por ello que se relatan los accidentes e incidentes, para estudiarlos y no caer en errores técnicos o de factores humanos.

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    By: Guillermo Galvan

    20 años en aerolíneas, instructor teórico aeronáutico, especialista factores humanos en aviación, melómano, cafeinómano.

    Sigue mi Columna ‘Nivel de Vuelo’ todos los lunes.

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