Sukhoi S-70 Ojotnik: El As en la manga de la aviación militar rusa
Sukhoi S-70 Ojotnik: El Futuro de los Drones de Combate.

Resumen
- Dron de combate stealth desarrollado por Sukhoi.
- Diseñado para operar junto con aviones tripulados como el Su-57.
- Capacidad de transportar armamento pesado y realizar ataques de precisión.
- Posible producto de exportación y clave en la modernización militar rusa.
El Sukhoi S-70 Ojotnik, también conocido como “Cazador” en ruso, es un dron de combate avanzado desarrollado por Sukhoi en colaboración con MiG, bajo el programa de la Fuerza Aérea Rusa. Esta aeronave no tripulada (UCAV, por sus siglas en inglés) representa un avance clave en las capacidades militares de Rusia, enfocándose en la guerra aérea moderna y los conflictos futuros. El S-70 es el resultado de la inversión rusa en tecnologías avanzadas, destinadas a desarrollar una flota de drones capaces de operar en misiones de combate complejas y ofrecer apoyo directo a aeronaves tripuladas.
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Desarrollo y Características
El proyecto del S-70 comenzó como parte del programa de modernización militar de Rusia, con énfasis en el desarrollo de sistemas autónomos. Su desarrollo estuvo encabezado por la empresa Sukhoi, con años de experiencia en aeronaves de combate como el Su-57. El S-70 está diseñado para trabajar en conjunto con aviones tripulados, especialmente con el Sukhoi Su-57, formando un equipo “manned-unmanned” o tripulado-no tripulado.
Diseño y Tecnología
El Ojotnik cuenta con un diseño stealth, de perfil bajo, similar al de los aviones de combate de quinta generación. Su estructura es de ala volante, lo que reduce significativamente su firma de radar y lo hace extremadamente difícil de detectar. El fuselaje está construido con materiales compuestos avanzados que maximizan su capacidad de sigilo, algo esencial en operaciones de combate modernas donde la sorpresa y la evasión son cruciales.

El sistema de propulsión del S-70 está impulsado por un motor turbofan, proporcionando una alta capacidad de maniobra y un alcance significativo, que puede alcanzar hasta 6,000 kilómetros, lo que le permite realizar misiones a gran distancia. Además, el Ojotnik tiene la capacidad de volar a velocidades supersónicas en algunas versiones proyectadas, algo poco común en drones actuales.
Armamento y Capacidades de Misión
El Sukhoi S-70 no solo es un dron de reconocimiento, sino también una plataforma de ataque. Tiene la capacidad de llevar una variedad de armamento, incluidas bombas guiadas y misiles aire-tierra. Puede realizar misiones de ataque de precisión contra objetivos estratégicos y vehículos blindados, lo que le permite operar tanto en escenarios de combate convencionales como en guerras asimétricas.
Una de las características clave del Ojotnik es su capacidad para interoperar con cazas tripulados, como el Su-57. Este dron puede actuar como un ala no tripulada, proporcionando soporte en operaciones de combate aéreo y aumentando el poder de fuego y la capacidad de ataque coordinado. Al operar en tándem con cazas tripulados, el S-70 puede abrir nuevas oportunidades para el control del espacio aéreo y aumentar la supervivencia de las fuerzas aéreas rusas en situaciones de combate.
Implementación y Futuro
El Sukhoi S-70 Ojotnik ha sido sometido a varias pruebas exitosas desde su primer vuelo en 2019. La Fuerza Aérea Rusa tiene grandes planes para este UCAV, que se espera que entre en servicio de manera regular en los próximos años. Se proyecta que los drones S-70 no solo operarán junto a los Su-57, sino que también podrían formar parte de un sistema de combate autónomo más grande, con la capacidad de tomar decisiones en el campo de batalla sin la necesidad de intervención humana directa, gracias a su tecnología de inteligencia artificial (IA).
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Además de su papel en la Fuerza Aérea Rusa, el S-70 ha generado interés a nivel global debido a su avanzada tecnología y potencial como producto de exportación. Muchos países que buscan modernizar sus flotas aéreas ven el Ojotnik como una opción rentable y eficiente para mejorar sus capacidades militares.

El Sukhoi S-70 Ojotnik representa un hito en la evolución de la guerra moderna. Su capacidad para operar en misiones de combate de alta complejidad, junto con su diseño stealth y su interoperabilidad con aviones tripulados como el Su-57, lo convierten en un activo estratégico para las fuerzas armadas rusas. Con el creciente interés en los sistemas autónomos y la IA aplicada a la guerra, es probable que el S-70 juegue un papel crucial en los conflictos futuros, marcando el inicio de una nueva era en la aviación militar.