Podría ya no volverse a fabricar el Boeing 747… lloremos
Una disminución significativa en la demanda de la reina de los cielos -el Boeing 747- para los operadores del transporte de pasajeros podría dar origen al cese de producción de uno de los equipos más significativos para el fabricante norteamericano que desde 1967 se comenzó a planificar a través de 75.000 dibujos de lo que sería el avión más grande de pasajeros.
El invento que revolucionaría la manera de viajar en vuelos trasatlánticos, el glamour de un coloso con ala y un proyecto que salvo de tantas a Boeing tristemente podría desaparecer.
Cabe una ligera duda, pues algunos, pero muy pocos operadores cargueros continúan interesados por el avión; quizá la producción sea tan lenta y pobre, que dentro de poco esa energía se apague, junto a los miles de focos que yacen en uno de los hangares más grandes del mundo donde se lleva a cabo la construcción de este avión, que es de tan sólo 472 millones de pies cúbicos, ubicado en Everett, Washington.
Quizá el Boeing 747 se encuentra cansado, devaluado y un tanto superado por las nuevas máquinas, por no mencionar que su padre, Joe Sutter, murió hace poco. Las previsiones del fabricante Boeing es de tan sólo 81 aviones en los próximos 20 años, algo que recientemente comentó el vicepresidente de Marketing de Boeing Randy Tinseth, a la revista ATW, en una entrevista exclusiva.
Una de las últimas entregas que hará Boeing de la variante más nueva será para Korean Air que este próximo mes de julio recibirá un Boeing 747-8I. La entrega se produce por una pequeña motivación al proyecto que ocurrió el año pasado 2016, cuando United Parcel Services (UPS) realizó un pedido por 14 aviones Boeing 747-8.
Así como lamentamos el fin de la producción de aviones emblemáticos como el Boeing 727, 757, 767, por mencionar algunos, en esta ocasión los operadores y las necesidades del mercado apuntan a aviones widebody más afinados para obtener mayor rentabilidad.
Podríamos decir que las nuevas versiones de los Boeing 777X y el Boeing 787 en sus variantes, han desplazado obligadamente al Boeing 747, a pesar de que hace casi una década el fabricante norteamericano lanzó al mercado la variante Intercontinental, en un intento por rescatar el programa que, al día de hoy, pretende desaparecer.
Como dicen “todo por servir se acaba” y vaya que este caballo de batalla de grandes aerolíneas sirvió durante casi cinco décadas, transformando la manera de volar de un continente a otro de forma más asequible para los pasajeros que vieron una disminución significativa en los precios del boleto.
Al 28 de junio del 2014, Boeing entregó un número total de 1.500 aviones B747, una cifra que lo posiciona como el avión de fuselaje ancho más vendido en la historia de la aviación y que hoy podemos decir que tiene los días contados.
El Boeing 747 fue el resultado del trabajo de 50.000 personas llamados “The Incredibles”, quienes, entre mecánicos, ingenieros, administradores, secretarias, etc., hicieron historia en sólo 16 meses, construyendo el avión civil más grande del mundo en la década de los 60’.
Las últimas perspectivas del mercado (OCM) de Boeing proyectan 41,030 nuevos aviones en los próximos 20 años, que refleja una estimado de 6.1 mil millones de dólares, dónde el mercado ha elegido los aviones narrowbody como los más asequibles, con 29,530.
Además, también se pronosticó 920 aviones de carga, siendo el 787 Dreamliner y Boeing 777X los equipos preferidos por los operadores, y en donde en esta ecuación se les olvidó por completo el Boeing 747. ¡Qué lástima!