Se cumplen 2 años de la destrucción del avión más grande jamás construido: Antonov An-225 Mriya

Este artículo ofrece un recorrido por la vida de esta impresionante aeronave, desde su concepción hasta su trágico final el 24 de febrero de 2022, cuando fue destruido durante la invasión rusa de Ucrania.

Orígenes e Intenciones

El Antonov An-225 Mriya, conocido por ser el avión más grande del mundo, representa un capítulo fascinante y ahora concluido en la historia de la aviación. Su origen, servicio distintivo y eventual destrucción se entrelazan con momentos significativos en la historia global, desde la Guerra Fría hasta conflictos contemporáneos.

• También podría interesarte: ¿Será posible construir el segundo Antonov AN-225 Mriya?

NOTA: Si no puedes ver el video, da click aquí.

El An-225 fue desarrollado en la década de 1980 por la Oficina de Diseño Antonov en la entonces Unión Soviética, específicamente para transportar el transbordador espacial soviético Buran y otros cargamentos de gran tamaño para el programa espacial del país. Su nombre, “Mriya”, significa “sueño” en ucraniano, un nombre que reflejaba las ambiciones de sus creadores y su país de origen.

La construcción del primer (y por muchos años, el único) An-225 comenzó en 1984 en la planta de Antonov en Kiev, entonces parte de la Unión Soviética. La construcción fue un desafío monumental, no solo debido a las dimensiones y características únicas del avión sino también por la necesidad de crear nuevas herramientas y procesos para su ensamblaje.

Con su primer vuelo en 1988, el An-225 marcó un hito en la ingeniería aeronáutica. Su diseño se basó en el anterior An-124 Ruslan, ampliando sus dimensiones y capacidad. El Mriya estableció más de 240 récords mundiales, incluyendo el de la carga aérea más pesada levantada y transportada.

Diseño y Capacidad

El An-225 era único en muchos aspectos. Con una envergadura de 88,4 metros y una longitud de 84 metros, estaba propulsado por seis motores turbofán, lo que le permitía cargar hasta 250 toneladas de carga. Su compartimento de carga, el más largo de cualquier avión en servicio, medía más de 43 metros. Estas características lo hacían ideal para transportar cargas sobredimensionadas, incluyendo equipos industriales, turbinas eólicas y ayuda humanitaria.

Uso Civil y Records

Tras el colapso de la Unión Soviética, el An-225 pasó a manos de la recién independizada Ucrania, operado por Antonov Airlines. A pesar de que inicialmente se construyó para fines militares y espaciales, el Mriya encontró una segunda vida en el transporte civil de cargas súper pesadas y de gran tamaño a nivel global. Su capacidad para llevar cargas únicas lo hizo indispensable en situaciones que requerían transporte aéreo especializado.

El Final Trágico

El final del An-225 llegó abruptamente el 24 de febrero de 2022, durante los primeros días de la invasión rusa de Ucrania. Ubicado en el Aeropuerto de Hostómel, cerca de Kiev, el Mriya fue destruido en un bombardeo. Este evento no solo marcó la pérdida de una pieza icónica de la ingeniería aeronáutica sino también el fin de un símbolo de orgullo y logro para Ucrania y para los entusiastas de la aviación en todo el mundo.

Legado y Memoria

La destrucción del Antonov An-225 Mriya fue un momento sombrío en la historia de la aviación, poniendo fin a la era del avión más grande jamás construido. Sin embargo, el legado del Mriya perdura. Representó el pináculo de la innovación en la ingeniería aeronáutica y la capacidad humana para superar los límites del transporte aéreo. Su historia sigue inspirando a ingenieros, pilotos y a todos aquellos fascinados por la aviación, recordándonos las posibilidades y también las fragilidades de nuestros logros tecnológicos.

A dos años de su destrucción, el recuerdo del Antonov An-225 Mriya sigue vivo, honrado por aquellos que conocieron su grandeza y lamentaron su pérdida. Su historia, desde los ambiciosos días de la Guerra Fría hasta su papel en operaciones humanitarias y, finalmente, su trágico final, continúa siendo un testimonio del ingenio y la resiliencia humanos frente a los desafíos geopolíticos y técnicos.

Ficha Técnica