Turkish Airlines jubila con honores a Capitán con 48 años de servicio y 33,000 horas

Turkish Airlines tuvo un evento fuera de serie en la aviación la semana pasada, ya que uno de sus capitanes, Ceyhan Yilmazcan, se retiró con las cifras récord de 48 años de volar y más de 33,000 horas de vuelo acumuladas.

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Su último vuelo fue en el asiento izquierdo de un Airbus A330 cubriendo un vuelo entre Hamburgo y Estambul, en donde le dieron un pastel de despedida cortado por el personal de Turkish en Hamburgo. En este vuelo estuvo acompañado por el Primer Oficial Gökhan Arik, que es hijo de uno de sus amigos de la infancia y quien también es piloto, Mehmet Arik, retirado apenas en abril pasado.

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A su llegada de Hamburgo, Ceyhan fue recibido en el aeropuerto por amigos, colegas, familiares y personal de Turkish, que llegaron para celebrar con él su último vuelo como comandante de un vuelo de la aerolínea nacional turca.

Inició su carrera como piloto militar en 1974 y se unió a Turkish Airlines en 1996, cuando era todavía una aerolínea no muy grande con 36 aviones. Pero desde su llegada fue uno de los impulsores de la aerolínea, asumiendo responsabilidades de instructor, por lo que fue una de las piedras angulares que llevaron a Turkish a ser una de las aerolíneas más exitosas del mundo.

Contabilizando sus horas de vuelo desde que inició como piloto en la fuerza aérea de su país, acumuló más de 33,000 horas al mando de un avión, y fueron muchos tipos de aviones los que tuvo la fortuna de pilotear, tanto militares como civiles. Durante su último vuelo se dirigió a los pasajeros con un anuncio muy especial:

Damas, caballeros y queridos niños, como su comandante, Ceyhan Yılmazcan, estoy haciendo el anuncio más importante de mi profesión de piloto de 48 años. Con este vuelo culminaré mi aventura en el cielo y me despediré de la profesión de piloto, que es una pasión para mí. Voy a pasar tiempo con mis nietos y les contaré los recuerdos que he acumulado en los últimos años. Les deseo a ustedes y a la familia de Turkish Airlines aterrizajes seguros en sus vuelos y buena salud y felicidad en sus vidas”.

Por supuesto que no será fácil despedirse de los cielos luego de 48 años, pero al llegar al límite de su jubilación no tenía opción. Pero afirmó estár muy feliz por estos 48 años cumplidos con seguridad, felicidad y amor, y comentó:

Es una gran oportunidad ser piloto, pero ser piloto de una aerolínea de bandera como Turkish Airlines te da la oportunidad de ver todo el mundo, hace que esta oportunidad sea aún más especial. A los jóvenes que sueñan con convertirse en pilotos les aconsejo que se esfuercen y no se rindan. Deseo vuelos seguros a mis amigos y a toda la familia de Turkish Airlines que todavía está trabajando”.