¡Bomba a bordo! Vuelo 575 de Mexicana de Aviación

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El 24 de septiembre de 1952, el vuelo 575 de la compañía Mexicana de Aviación estaba programado para salir de Ciudad de México con rumbo al Aeropuerto de Oaxaca a las 07:00LT (GMT-5), con diecisiete pasajeros y tres tripulantes. Al pie de la puerta del Douglas DC-3A matrícula XA-GUJ, una bolsa de viaje pequeña pero pesada fue entregada a la auxiliar de vuelo Irma Carranza.

El hombre, que no era uno de los pasajeros del vuelo MX575, dijo que la bolsa iba a ser recogida por un pasajero más tarde, práctica muy común (y permitido) en esta época. A la sobrecargo, él insistió que la bolsa quedara en la cocina trasera, cerca de la puerta y empenaje del avión. 

Después de que los diecisiete pasajeros abordaron el avión, el despegue se retrasó porque una sobrecargo que estaba asignada al vuelo 577 quería cambiar de turno con Irma Carranza.

Mientras esperaba a su colega para hacer el cambio, Irma despejó la cocina trasera y movió la bolsa al compartimento de equipaje delantero, entre la cabina de pasajeros y la cubierta de vuelo. Después de un retraso de aproximadamente cuarenta minutos, el DC-3 despegó hacia Oaxaca.

Después de 45 minutos en vuelo con el primer oficial al mando de los controles y el capitán trabajando en la bitácora, una bomba explotó causando una fractura enorme en el lado izquierdo del fuselaje, apenas detrás de la cabina. La metralla que ocasionó la explosión golpeó el motor izquierdo y los parabrisas se rompieron.

En cabina, dos pasajeros sufrieron fracturas en las piernas ya que la pared del compartimiento de equipaje se había derrumbado y otros tres pasajeros resultaron heridos por dicha explosión. Sin instrumentos, visibilidad muy limitada, todavía desconcertado por la explosión, la tripulación hizo por despejar la humareda para tener visibilidad.

Después de media hora, el capitán descendió atravesando las nubes y encontró la Base de la Fuerza Aérea Militar de Santa Lucía, donde realizó un aterrizaje seguro.

Parecía que la bolsa que aquel hombre había entregado a la asistente de vuelo contenía una bomba de tiempo. Dos hombres habían planeado recolectar ocho pólizas de seguro de vida compradas por el mismo número de pasajeros que previamente habían contratado para trabajar en un hotel ficticio en la ciudad de Oaxaca.

Después de la investigación, dos sospechosos fueron arrestados y condenados a cuarenta años en prisión.

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    By: Redacción

    “Uniendo al mundo de la aviación, en una misma frecuencia”.

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