Aeroméxico: momento de un cambio

La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), a través del Instituto de Investigaciones Jurídicas, refiere al derecho de huelga que:

De acuerdo con el principio de libertad sindical, corresponde a los trabajadores determinar cuáles son los fines que pretenden alcanzar a través de la proclamación y, en su momento, del estallamiento de la huelga”.

Lo sucedido hace unos días entre la empresa Aeroméxico y su sindicato de Pilotos no debe de alarmar a nadie pues es precisamente un derecho el que se ejerce al hacer valer pretensiones de bienestar general.

Al menos claro, en el bienestar de los Pilotos de Aeroméxico. Recordemos que sólo dos aerolíneas cuentan con la protección Sindical de ASPA. Las otras, tienen un sindicato presencial que pareciera nunca estar a favor de los Pilotos o de empleados en general.

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A pesar de haberse conjurado la huelga, el problema sigue latente.

Este problema inició en 2009 cuando en el mundo se restringió el libre tránsito de pasajeros debido a la crisis mundial de influenza tipo A H1N1. Pero en 2010 se hicieron evidentes las repercusiones económicas y las aerolíneas (como Aeroméxico) resintieron los golpes.

Fue ahí donde se decidió, “para efectos de ahorrar dinero y seguir operando la aerolínea”, que aquellos Pilotos que ingresaran a partir de 2010, lo harían bajo otro esquema contractual restringido económicamente. 

“Era temporal” se decía.

Pasaron 6 años, se integraron aeronaves de última generación, aumentaron rutas internacionales, dominaron por un momento el mercado nacional cuando Mexicana de Aviación y Aviacsa dejaron de operar, crecieron y se expandieron pero el contrato “B” de 2010 no se modificó sino hasta 2016.

Esta modificación tampoco era suficiente, porque en términos operacionales, los Pilotos del contrato B, volaban más ganando lo mismo.

Lo cual nos trae hasta 2018.

Cerca de la media noche del martes 02 de octubre, el sindicato ASPA y Aeroméxico lograron un acuerdo para incrementar los beneficios del contrato “B” pero esta vez, se habrá de revisar en 2019.

Esta próxima revisión, no permitirá que la empresa pueda hacer planes a largo plazo sobre rutas, aeronaves y estrategias y es precisamente el tema de estrategias el que debemos analizar.

En algunos medios se dio a conocer el supuesto sueldo que ganan los Pilotos de Aeroméxico, estrategia vil que se utilizó durante la crisis de Mexicana para (supongo) crear una idea-fuerza de que los Pilotos en México son suficientemente bien pagados.

Recordemos algo: ni todos los Pilotos en México somos sindicalizados, ni todos los Pilotos en México ganan buenos sueldos. Creo que esta vez, a la Administración de Grupo Aeroméxico le faltó visión y estrategia.

Le faltó visión porque siendo Aeroméxico la única línea internacional, se debe cuidar siempre la estabilidad de la fuente de empleo. Si, se entiende que naturalmente es un negocio que debe generar dinero, nadie estaría en contra de ello, pero hay formas de hacer dinero: la forma más ortodoxa y aquella con responsabilidad social.

Nosotros creemos en la responsabilidad social: sueldos justos, justo balance entre empleados y empresa.

Faltó estrategia porque pareciera que la Administración solo fue “pateando el bote”, como se le llama coloquialmente a la acción de dejar que un problema se extienda hasta las últimas consecuencias.

Aeroméxico tiene un problema operacional y de relación con sus pasajeros, que no clientes. No es ya aquella aerolínea que ofrecía un servicio al pasajero con trato digno, se ha perdido en el mundo del bajo costo, en esa ilusión de tener multitarifas por sección de cabina / asiento, reducción de espacios y cobro por pieza de equipaje.

Sí, es unan forma de hacer dinero y crecer las arcas, pero ¿a costa de qué?

Es momento de que en la Administración de Aeroméxico se plantee un golpe de timón, es todavía momento de que se dirija a la aerolínea con ideas nuevas, visión enfocada al trabajo en equipo y sobre todo, nunca casarse con la creencia de que los Pilotos son los enemigos de las empresas.

Al Piloto, cuando se le trata bien, con justicia y dignidad, se está invirtiendo en el futuro de la empresa, en la mejora de procesos y en la mejor observación de los procedimientos de seguridad.

Ha llegado el momento de hacer un cambio en la administración de esa aerolínea.