La española Iberia celebra 95 años desde su fundación

Tiempo de lectura: 5 minutos

Luego de la Primera Guerra Mundial el rápido avance en la tecnología aeronáutica comenzó a posibilitar los viajes rápidos hacia lugares lejanos por motivos de negocios. Alemania tenía bastantes en África y Sudamérica, pero tenía que hacer los viajes por barco o tren, ya que el Tratado de Versalles prohibía a los aviones alemanes volar sobre territorio francés, por lo que se exploró la posibilidad de ampliar los lazos con España, por lo que la Deutsche LuftHansa estableció un acuerdo general con el gobierno español, de parte del gobierno alemán, para autorizar los servicios aéreos entre los dos países.

El 28 de junio de 1927 se creó Iberia, Compañía Aérea de Transportes, con una inversión inicial de $1.1 millones de pesetas, por el empresario Horacio Echeberrieta y la alemana Deutsche LuftHansa, la cual obtuvo autorización para establecer servicios comerciales entre Madrid y Barcelona, con una flota de tres monoplanos Rohrbach Ro VIII Roland comprados a la aerolínea alemana.

Las operaciones comenzaron el 14 de diciembre del mismo año, el vuelo inaugural tuvo una ceremonia previa en el aeródromo de Carabanchel, estuvo presente el Rey Alfonso XIII y el presidente de Iberia, Horacio Echeberrieta. El primer vuelo salió de Madrid a tiempo, a las 12:30LT (GMT+2), llegando a Barcelona tres horas y media después. Pero el vuelo de regreso tuvo que desviarse a Almazán Soria por la reducida visibilidad en Madrid por causa de una nevada.

En su primer año el gobierno apoyó a la empresa para que ofreciera transporte de correo entre Madrid y Barcelona, y a Deutsche LuftHansa se le dio el 24% de participación en Iberia luego de que se le otorgara el servicio regular entre Alemania y España, con lo que el 5 de enero de 1928 inició la ruta Barcelona – Marsella – Génova – Zúrich – Stuttgart – Leipzig – Erfurt – Berlín. A mediados de ese año se agregó a la flota un bimotor Dornier Do J Wal que se usó para una ruta entre Cádiz y las Islas Canarias, con la que se probó la viabilidad de hacer una ruta postal a Sudamérica, extendiendo la ruta vía Cabo Verde.

Durante la dictadura de Miguel Primo de Rivera se propuso que todas las aerolíneas españolas se fusionaran en una controlada por el estado, por utilidad pública; por lo que Iberia se fusionó en Compañía de Líneas Aéreas Subvencionadas S.A., junto con Unión Aérea Española, Compañía Española de Tráfico Aéreo, la Compañía Española de Aviación y Transaérea Colón. El registro del nombre de Iberia lo mantuvo el director de la empresa, Daniel de Araoz, por lo que fue la única en existir luego de la fusión.

Luego de la proclamación de la Segunda República Española en 1931, LAPE (Líneas Aéreas Postales Españolas) reemplazó a CLASSA en abril de 1932, y operó incluso durante la Guerra Civil, aunque muchos de sus aviones fueron requisados por la Fuerza Aérea para ser usados como transportes militares. El nombre “Iberia” se usó de nuevo cuando una nueva aerolínea inició operaciones en 1937, en un territorio controlado por los rebeldes, y cuando la guerra terminó en 1939, los aviones de la flota de LAPE se repintaron con la librea de Iberia.

La aerolínea realmente reinició sus operaciones completas luego de terminar la Segunda Guerra Mundial, primero como aerolínea completamente doméstica pero luego fue recuperando derechos para rutas a otros países, comenzando por Lisboa. Posteriormente se le ofreció participación a la aerolínea italiana Ala Littoria, que decidió invertir en el capital de Iberia con tres aviones Ju 52 sin motores que le compró a Lufthansa y se los entregó a Iberia como aportación de capital, los cuales se pusieron a trabajar en la ruta Roma-Venecia-Múnich-Berlín. La empresa mantuvo lazos con Lufthansa durante la Segunda Guerra pero los Aliados se opusieron a la cooperación hasta que se rompieron los lazos con el gobierno alemán Nazi.

La aerolínea fue nuevamente nacionalizada el 30 de septiembre de 1944, y en 1946, usando un Douglas DC-4, inició vuelos de Madrid hasta Montevideo y Buenos Aires, convirtiéndose en la primera aerolínea en unir Europa con Sudamérica. El mercado resultó muy lucrativo ya que ayudó a reunir familias que quedaron separadas por la Guerra Civil; pero se desató una fuerte competencia de Air France, KLM y British South American y la empresa comenzó a tener problemas para atender la demanda doméstica, por lo que el gobierno le permitió a otra aerolínea, Aviaco, explotar las rutas que Iberia no estuviera volando.

Gracias al Pacto de Madrid de 1953 se eliminó la visa entre EEUU y España, lo que estimuló los vuelos trasatlánticos entre ambos países, y los cambios realizados a la Convención de Aviación Civil Internacional en 1954 ayudaron a España a impulsar el turismo con aviones chárter. Iberia adquirió una flota de Lockheed Super Constellation para sus vuelos a Norte y Sudamérica y el Convair 440 presurizado para sus vuelos europeos a partir de 1957.

A partir de 1961 Iberia entró a la era del jet con la llegada de los primeros Douglas DC-8 de largo alcance, su ruta con más demanda entonces era Madrid – Buenos Aires. En 1964 se creó un Consejo entre Iberia y Aviaco para coordinar sus servicios y evitar conflictos. En 1970 compró Douglas DC-9 y Boeing 747, y expandió sus rutas a Centroamérica, Varsovia, Atenas y Estambul. En 1974 estableció el primer servicio de shuttle entre Madrid y Barcelona, el servicio de información telefónica Serviberia, precursor de los call-centers actuales, y los conocidos como ‘Sacos Rojos’ para resolver a los clientes problemas en los aeropuertos.

En 1977 celebró su 50 aniversario transportando más de 10 millones de pasajeros por primera vez en un año. Tras una fuerte deliberación, decidieron comprar el Boeing 727 para reemplazar los DC-9 por su mayor capacidad, pero este compromiso financiero con errores en los pasajeros esperados le causaron fuertes pérdidas en los ‘80s, lo cual fue decepcionante en 1982 en que se tuvo tanto una visita del Papa como la Copa Mundial de Fútbol.

Hacia finales de los ‘80s y durante los ‘90s se realizó una renovación de flota con mejor planeación, con McDonnell Douglas MD-87, Boeing 757, Airbus A320 y Airbus A340 para reemplazar sus DC-9, 727 y DC-10. A la vez, Iberia comenzó a desarrollar intereses en otras aerolíneas como Aviaco, Viva Air, Binter Canarias, Binter Mediterráneo, Aerolíneas Argentinas, Viasa y Ladeco, pero en 1990 un consorcio que buscaba Aerolíneas Argentinas le pagó $2,000 millones de dólares por el 85% de las acciones y el siguiente año vendió también su participación del 45% en Viasa por $145 millones de dólares.

En 1991 creó su primer programa de viajero frecuente “Iberia Plus” y su página web comenzó a funcionar en 1996. En 1998 firmó con Airbus por 76 aviones que en su momento fue el pedido más grande recibido por Airbus hasta entonces, y compró Aviaco en 1999. Ese mismo año se inició el proceso de privatización impulsado por la Unión Europea y el gobierno español, con lo que el 40% de las acciones se vendieron a accionistas, 9% a British Airways y el 1% a American Airlines.

El Grupo Iberia quedó formado por la aerolínea, Aviaco, su franquicia de Iberia Regional/Air Nostrum, así como todas las actividades de mantenimiento de aviones, manejo de servicios en aeropuertos, catering, sistemas de informática y paquetes de viajes. Fue, además, socio fundador del sistema de reservaciones Amadeus con el 18.3% de acciones que vendió en 2008; y es miembro fundador de Oneworld con American, British Airways. Para 2005 introdujo también su nueva clase Business Plus en su flota de aviones A340.

En noviembre de 2009 llegó a un acuerdo con British Airways para fusionar ambas empresas y crear la tercera aerolínea del mundo en ingresos, lo que se consumó en abril de 2010 formando International Airlines Group (IAG), aunque cada aerolínea sigue operando por separado con su identidad propia.

Hoy Iberia es la aerolínea líder entre Europa y Latinoamérica y está en un nuevo proceso de renovación de flota con aviones más eficientes que le permitan cumplir con sus compromisos ambientales tanto de esta década como de la aviación en general para el 2050. Su flota de A340 se cambió por A350 y sus aviones de un pasillo serán reemplazados por A320neos en los siguientes años.

A través de IAG controla además a la aerolínea de bajo costo Vueling y está en proceso de comprar a Air Europa, con lo que consolidará sus operaciones en Madrid como un hub internacional. Su flota actual está compuesta por 6 A319, 13 A320, 13 A320neo, 11 A321, 12 A330-200, 8 A330-300 y 12 A350-900 con 2 más pendientes de entrega, para un total de 75 aviones, más la flota de Iberia Express (23 aviones) e Iberia Regional / Air Nostrum (45 aviones).

Foto: Konstantin von Wedelstaedt/Wikipedia

  • author's avatar

    By: Erick Haw Mayer

    Apasionado de la aviación y la industria automotriz de toda la vida, tiene una Licenciatura en Informática y un Postgrado en Comunicación y R.P. Aunque tiene experiencia en empresas del rubro automotriz y en Mexicana de Aviación, su vida profesional se ha dedicado más al periodismo especializado en todo tipo de medios impresos y electrónicos, incluyendo la revista Avión Revue de Latinoamérica.

  • author's avatar

Deja tu comentario.