Una fractura en el álabe del motor, fue la causante del incidente del Boeing 787 de Norwegian

Como lo publicamos el pasado 10 de agosto de 2019, las autoridades aeronáuticas italianas en conjunto con la aerolínea noruega y la Agencia de Seguridad Europea (EASA), revelaron el informe sobre el incidente, en donde un Boeing 787-8 Dreamliner matrícula LN-LND, de la aerolínea Norwegian Air Shuttle sufrió una fractura de uno de sus álabes dentro de la turbina de presión intermedia del motor Rolls-Royce Trent 1000.

La fractura ocurrió a tan sólo 36 segundos después de que el avión partiera del Aeropuerto Internacional de Roma-Fiumicino. Cuando la aeronave ascendió a unos 3,000 pies de altitud, según testimonios de los pasajeros, se sintieron fuertes vibraciones y es cuando el motor arrojó algunas piezas.

Los fragmentos expulsados por el motor Trent 1000 dañaron a 25 autos y 12 hogares en el vecindario de Isola Sacra, Roma. Después del incidente, la tripulación a bordo del Boeing 787 realizaron patrones de espera para quemar combustible, y perder peso para poder realizar un aterrizaje de emergencia exitoso.

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Investigadores italianos, en conjunto con investigadores de Noruega, Alemania, Reino Unido, Estados Unidos y Francia, así como EASA, señalaron que esta es la décima ocasión que un motor Rolls-Royce Trent 1000 tiene una fractura en uno de sus álabes dentro de la turbina de presión intermedia. En el informe realizado, se evidenció que existe el riesgo de que expulse fragmentos del motor, en caso de una falla no contenida.

En el informe también se menciona que el motor que falló estaba debajo del límite de ciclos esperados, mientras que el otro motor estaba “más cerca del margen”, pero ambos se encontraban dentro de los límites normales. Gracias a la investigación se publicó un boletín de servicio para reemplazar los álabes de los motores Trent 1000.