Delta se une a Boeing en cabildeo por certificación del 737 MAX 10

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Ya no es una hipótesis, sino un hecho; Boeing no logrará obtener la certificación del 737 MAX 10 hasta final de año, quedando así sólo dos opciones, en teoría; o modificar el proyecto para agregar el Sistema de Indicación de Motores y Alerta a la Tripulación (EICAS), lo que sería costoso y llevaría mucho tiempo; o decidir descartarlo, como amenazó con hacerlo.

En la práctica, sin embargo, el fabricante estadounidense está reuniendo a grupos influyentes para cabildear y presionar al Congreso para obtener una excepción a los nuevos requisitos de certificación que se requerirán a partir del 1 de enero de 2023; ahora con el refuerzo de Delta Air Lines, el más nuevo cliente operador del Boeing 737 MAX 10. La información fue revelada por The Air Current, citando fuentes cercanas a Boeing y a la Administración Federal de Aviación (FAA). 

Según la publicación, entre bastidores, Delta y Boeing lanzaron una campaña con el apoyo de las otras tres principales (y más grandes) aerolíneas estadounidenses que forman el llamado grupo “Big 4” y que operan el 737 MAX, a saber, American Airlines, United Airlines y Southwest Airlines, para presionar al Congreso para conceder la exención al MAX 10.

Fue hace dos años que se aprobó una reforma al Acta de Seguridad y Certificación de Aviones, actualizando el proceso de supervisión de la Administración Federal de Aviación (FAA) y obligando además que todo avión que se certifique a partir del próximo año debe cumplir con la más reciente regulación de alertas a la tripulación. La legislación fue diseñada para entrar en vigor después de la certificación de toda la familia Boeing 737 MAX, según The Current Air.

Sin embargo, después de las críticas sobre el negligente proceso de supervisión que resultó en dos accidentes fatales con el modelo, la agencia reguladora tardó en certificar las nuevas variantes, centrándose en un escrutinio más intenso, incluso después de haber recertificado el MAX 8 y el MAX 9 a finales del 2020. Así que ahora, sin tiempo y seguro de que no podrá certificarlo a tiempo, sólo le queda presionar al Congreso, el único que puede salvarlo.

El principal reclamo es que el 737 MAX 10 es el único avión capaz de competir con el A321neo; y habiendo registrado ya más de 700 pedidos en firme, cancelarlo como amenazó con hacerlo Boeing no sería beneficioso para el mercado y la economía. ¿Las aerolíneas serán capaces de lograr el objetivo de “salvar” el 737 MAX 10? Esta escena será para el próximo capítulo de esta larga e interminable novela alrededor del avión de un solo pasillo más grande de Boeing.

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    By: Erick Cerqueira

    Amante de la aviación desde el nacimiento, trillando caminos hacia vuelos más altos.

    Bachillerato en Relaciones Internacionales por la Federal University of Sergipe (UFS).

    En Instagram @ecfilho_ | [email protected]

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