Conoce la historia del legendario Stinson de Aeroméxico
Transcurría el año 1934, la música swing comenzaba a ponerse de moda y la aviación florecía acercando el transporte aéreo a cada vez más personas. En aquella época la carga y el correo eran lo que más se transportaba en México por vía aérea. Gracias a que algunos empresarios como Antonio Díaz Lombardo notaron el potencial que tenía la aviación, decidieron invertir en el eficiente medio de transporte. Aquel hombre de negocios y visionario tenía una afición por Acapulco, por lo que decidió acortar el tiempo de traslado de 1 día por tierra a una hora con 40 minutos de vuelo.
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Antonio Díaz Lombardo decidió formar una empresa que ofreciera traslados en avión desde la capital del país hasta la costa guerrerense. Por lo que solicitó un “permiso experimental” a la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas y fundó la compañía Aeronaves de México. En aquel entonces aún no contaba con ningún avión, por lo que se dio a la tarea de investigar cuál sería el candidato ideal. Viajó a Kansas City con el piloto Julio Zinser donde decidió probar el Stinson Reliant SR-5A con matrícula NC14163. El monoplano cumplió todas las expectativas del empresario y del piloto, por lo que lo adquirieron.
Antonio Díaz y Julio Zinser emprendieron el viaje de regreso con su nueva adquisición. Despegaron el 27 de agosto de 1934 e hicieron escalas en Kansas, Tulsa, Dallas, San Antonio, Brownsville, Tampico hasta llegar a la Ciudad de México el 29 de agosto. El Stinson Reliant SR-5A cambiaría su matrícula extranjera por XB-AJI. Durante los siguientes días, continuaron probando el comportamiento del avión en cuanto a la elevación de la Ciudad y la temperatura. Asimismo, realizaron pruebas de la ruta para que no hubiera contratiempos en el vuelo inaugural.
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El 14 de septiembre de 1934, el día del vuelo inaugural, el XB-AJI despegó con cinco pasajeros desde el Campo Aéreo Balbuena. En la travesía también lo acompañó el Travel Air con matrícula XB-AJK (También propiedad de Antonio Díaz Lombardo). Siguieron la ruta Balbuena, Chalco, Cuautla, Iguala, Chilpancingo, Acapulco. El Stinson Reliant SR-5A aterrizó en el Campo “Hornos” cerca de la bahía de Acapulco, donde fue recibido por Antonio Díaz Lombardo. Por su parte el Travel Air se perdió en algún punto en la ruta y sufrió un incidente al aterrizar, afortunadamente no hubo heridos graves. El festejo pudo continuar, se celebró una ceremonia y el servicio aéreo regular México-Acapulco quedó establecido.
El Stinson Reliant SR-5A protagonizó el crecimiento del negocio, la apertura de nuevas rutas, del progreso y también las dificultades del transporte aéreo durante aquellos años. Durante sus primeros 3 meses de operación, realizó 45 vuelos redondos México Acapulco y llegó a operar destinos como Tehuacán, Puebla, Ometepec, Oaxaca, entre otros. Asimismo, se utilizó como aeronave de instrucción de los futuros pilotos de la compañía. Unos años después, en 1936 con el incremento de los vuelos y el éxito del negocio, Antonio Diaz Lomabrdo decidió vender el XB-AJI a un empresario estadounidense. Por lo que la aeronave regresó a los Estados Unidos y se le reasignó su matrícula anterior. Transcurrieron muchos años y el Stinson parecía haberse perdido en el tiempo.
Un afortunado encuentro
De acuerdo con la Air Line Pilots Association (ALPA) durante el verano del 2013, el Capitán Bob Schneberger, un piloto retirado de US Airways se enamoró del monoplano en el evento EAA AirVenture Oshkosh fly-in. Por lo que terminó comprándolo a Heith Swalheim, el dueño en aquel entonces. Poco tiempo después, el Productor Ray Sinatra realizaba un documental relacionado con el aniversario 80 de Aeroméxico y buscaba un Stinson Reliant para su documental. Ray Sinatra contactó a Bob Schneberger para conocer si la aeronave estaba en condiciones de volar y si estaba dispuesto a viajar a la Ciudad de México. Schneberger declinó la invitación, pero durante aquel encuentro con el productor revisó los registros y se dio cuenta que el avión que poseía había pertenecido a Antonio Díaz Lombardo y que había sido el primer avión de Aeroméxico.
El documental de Ray Sinatra no se llevó a cabo. Sin embargo, Schneberger se sintió con la obligación de contactar a la aerolínea mexicana. Aeroméxico, completamente interesado, envió algunos de sus representantes a Virginia en el verano del 2015 para verificar la procedencia de la aeronave. Al descubrir que efectivamente había sido su primer avión, reconocieron que debían traerlo de vuelta.
El regreso
El viaje de regreso comenzó el 26 de mayo tripulado por el Cap. Schneberger y por el Cap. Alejandro Garfias, Capitán de Boeing 737 de Aeroméxico. Luego de una ruta que duró 8 días, 29 horas de vuelo, que consumió 260 galones de combustible y pasó por 13 aeropuertos; el Stinson Reliant SR-5A aterrizó en Base Aérea Militar número 1, en Santa Lucía. A su llegada se realizaron trabajos de mantenimiento y pintura. Removieron el livery anterior y le asignaron los mismos colores con los que realizó su primer vuelo en 1934.
El 5 de febrero del 2017 el Stinson Reliant SR-5A realizó su llegada triunfal al Aeropuerto de la Ciudad de México. Tres días después se realizó una ceremonia en el Hangar Oriente de Aeroméxico donde el CEO de Aeroméxico, Andrés Conesa, los empleados de la aerolínea y sus familiares miraron con asombro y alegría el regreso de su primera aeronave. La travesía quedó registrada en el Documental “Stinson, El Regreso de una Leyenda” dirigida por Miguel Catalán. Actualmente el avión se encuentra exhibido en el Museo de la Base Aérea de Santa Lucía como homenaje a los primeros vuelos civiles en México.
Foto: Documental “Stinson, el regreso de una leyenda”