Estela turbulenta de un A320 provocó la pérdida de control e impacto de un Cirrus SR22: ¿Qué dice la NTSB?

Tragedia Aérea Provocada por Estela Turbulenta: El Fatal Encuentro entre un Cirrus SR22 y un Airbus A320.

Resumen

• Un Cirrus SR22 se estrelló en diciembre de 2021 cerca del Aeropuerto McGhee Tyson de Knoxville, Tennessee, debido a la estela turbulenta de un Airbus A320 de Allegiant Air.
• La estela turbulenta es un fenómeno peligroso, especialmente cuando no se mantiene la distancia de seguridad recomendada de 4 millas náuticas entre aeronaves de diferentes tamaños.
• La tragedia destaca la importancia de la cooperación entre pilotos y controladores de tráfico aéreo.
• Este incidente debe servir como un recordatorio y una oportunidad para reforzar las prácticas de seguridad.

La Estela Turbulenta de un Airbus A320 Desencadena Accidente

En diciembre de 2021, en el Aeropuerto McGhee Tyson de Knoxville, Tennessee, se produjo un accidente aéreo cuando un Cirrus SR22, matrícula N162AM, encontró la estela turbulenta generada por un Airbus A320 de Allegiant durante su aproximación. Afortunadamente, el piloto del monomotor sobrevivió al impacto. Casi 3 años después del incidente, la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) ha revelado los resultados de su investigación.

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¿Qué es la Estela Turbulenta?

La estela turbulenta es un fenómeno invisible pero poderoso que surge de los vórtices creados por el desplazamiento de las aeronaves a través del aire. En este incidente, el Cirrus SR22 seguía de cerca al Airbus A320, una aeronave significativamente mayor, lo que resultó en una separación insuficiente entre ambos. Aunque las normativas de la FAA sugieren mantener una distancia de seguridad de 4 a 5 millas náuticas para mitigar los efectos de la estela, en este caso, la distancia fue de aproximadamente 1.8 millas. Gracias al sistema de paracaídas balístico del Cirrus SR22, tanto el piloto como un pasajero, quien también era piloto privado, sobrevivieron.

Las Investigaciones

Ambos aviones se dirigían a la pista 23L; el A320 ya había recibido autorización para aterrizar, mientras que el Cirrus estaba en un procedimiento de aproximación a la pista activa. Se advirtió al piloto del Cirrus de un tráfico (A320), a lo que respondió teniendo contacto visual con el mismo. Poco tiempo después, el monomotor desapareció del radar durante un viraje de base a final.

Esto provocó que el piloto del Cirrus SR22 perdiera el control a muy baja altitud y realizara un viraje de 135° hacia la izquierda en menos de un minuto. Las condiciones de viento en ese momento no fueron un factor para el avión ligero, tampoco lo fueron las condiciones de visibilidad, que eran de 10 millas y con pocas nubes. Según la NTSB, el controlador no emitió ninguna alerta por radio sobre la estela turbulenta del A320, y esta es la conclusión final del reporte y que resulta ser sorprendente, ya que cualquier Piloto con criterio, debe mantener una separación correcta.

Sin embargo, para todos los operadores de aviones ligeros, las condiciones de estela turbulenta son comunes. Sin embargo, todo piloto debe conocer y mantener una distancia vertical y también horizontal con las trayectorias de aviones más grandes que le preceden, independientemente de si el controlador da o no instrucciones.

En estos eventos, la consciencia situacional es clave para evitar incurrir en estelas donde el avión se vuelve ingobernable, generalmente a bajas altitudes, lo que dificulta la recuperación del avión y puede provocar un impacto inminente contra el terreno.