“¡Deja de contaminar con tus aviones!”: Activistas reciben a pastelazos al CEO de Ryanair

Activistas medioambientales y sindicatos belgas se manifiestan en medio de una visita del CEO de Ryanair Michael O’Leary.

Resumen

• Michael O’Leary, el célebre CEO de Ryanair, enfrenta protestas medioambientales en Bruselas.
• Activistas le lanzan una tarta en la cara durante una conferencia de prensa.
• A pesar del incidente, O’Leary responde con ironía y humor ante las cámaras.
• Pilotos belgas de Ryanair anuncian nuevas huelgas buscando mejores condiciones laborales.

Un Encuentro Sorpresa en la Capital Europea

Durante una visita programada a Bruselas, Michael O’Leary, el prominente CEO de Ryanair, fue sorprendido por activistas medioambientales de una forma inusual: con una tarta de nata directamente en su cara. La manifestación abrupta vino acompañada de una exclamación reprobatoria: “¡Deja de contaminar con tus aviones!”.

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Un Recibimiento Belga con Sabor a Ironía

Mientras que uno de los activistas exclamó “¡Bienvenido a Bélgica!” al momento de ejecutar el acto, O’Leary, con su reconocido sentido del humor, no tardó en responder a las cámaras, aún con vestigios de la tarta en su rostro: “Nunca me habían recibido tan bien. Por desgracia eran ecologistas y la crema era artificial. Invito a los pasajeros a venir a Irlanda, donde la nata es mejor”.

Le immagini della torta in faccia a Michael O’Leary, patron di #Ryanair pic.twitter.com/PGOOy8chrV

— askanews (@askanews_ita) September 7, 2023

Protestas Bélgicas: Más Allá del Dulce Ataque

No solo fue recibido por activistas. Los pilotos belgas de Ryanair, con sede en el aeropuerto de Charleroi, han anunciado su intención de entrar en huelga por cuarta vez en solo dos meses durante los días 14 y 15 de septiembre. La razón detrás de esta acción: demandar mejores salarios y condiciones laborales, según fuentes sindicales CNE y ACV Puls.

La visita de Michael O’Leary a Bruselas resalta no solo el creciente descontento de los activistas medioambientales hacia la industria aérea, sino también las crecientes tensiones laborales dentro de Ryanair. El incidente con la tarta, aunque humorístico, sirve como un recordatorio de los desafíos multifacéticos que enfrentan las aerolíneas en el panorama actual.