Estudiante británica abre puerta y salta de Cessna 182 en pleno vuelo en Madagascar

La estudiante británica Alana Cutland, de 19 años de edad, se quitó la vida al abrir la puerta y saltar en pleno vuelo de un monomotor del fabricante aeronáutico estadounidense Cessna sobre una región remota en la isla de Madagascar, informó el periódico británico Daily Mail. Según la publicación, el accidente ocurrió a finales de julio y el cuerpo de la joven sigue desaparecido, mientras las autoridades locales trabajan para localizarlo y recuperarlo lo más pronto posible.

La joven era estudiante de ciencias naturales en el Robinson College de la Universidad de Cambridge y habría viajado a Madagascar para estudiar especies raras de cangrejos en la región. Según BBC World, el accidente ocurrió en el octavo día de Alana en Madagascar; ella debería quedarse allí por al menos seis semanas, señala. Las autoridades británicas están investigando toda la situación.

El accidente habría ocurrido el pasado jueves 25 de julio, cuando el avión, un Cessna 182 Skylane, despegó de una región remota en la isla africana con tres personas a bordo, siendo el piloto, identificado como Mahefa Tahina Rantoanina, de 33 años de edad, una pasajera, identificada como Ruth Johnson, de 51 años de edad, además de la estudiante británica. Toda la situación ocurrió cuando el avión volaba a unos 3.200 pies (1.000 metros) de altitud, alrededor de unos diez minutos luego del despegue.

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La joven, que supuestamente ya sufría de problemas mentales, habría tenido episodios de ansiedad y paranoia como reacción a unas tabletas contra la malaria. Durante el vuelo, simplemente habría abierto la puerta del avión e intentado saltar hacia afuera del Cessna, cuando fue agarrada en la pierna por el piloto y por la otra pasajera. Por cinco minutos, ambos han intentado controlarla y cerrar la puerta del equipo, pero desafortunadamente, no han logrado.

El cuerpo de Alana cayó en caída libre en una región remota habitada por animales carnívoros, lo que generó temor en las autoridades de que nunca localizar el cuerpo; se ha utilizado un helicóptero desde el día del accidente para intentar localizarlo, pero hasta ahora, sin éxito. La institución educativa donde Alana estudiaba lamentó la fatalidad; la familia de la joven, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores y de la Mancomunidad de Naciones del Reino Unido (Foreign Office), pidió privacidad en este momento de dolor.