La pandemia del COVID-19 ha oxidado las habilidades de los pilotos
Desde este portal hemos reportado diversos incidentes ocurridos durante el año pasado. Ante estos sucesos, algunos de los pilotos involucrados, han señalado estar “oxidados” debido a la crisis derivada por la pandemia. La demanda cayó a sus peores niveles y, por tanto, estuvieron apartados de los cielos durante mucho tiempo.
Un Primer Oficial que olvidó activar el sistema anti hielo, declaró en la investigación correspondiente a este incidente que la causa de este error se debió a que estaba “fuera de práctica” pues no había volado en meses. Respecto a sus procedimientos de operaciones, agregó:
Sentí que mis recuerdos eran suficientemente fuertes, pero en realidad debería haberme tomado un tiempo para revisar”.
Expertos en aviación, así como representantes de las aerolíneas, reconocen que, cuando los pilotos están inactivos durante varios meses, sus habilidades y competencias se deterioran. Entre los errores más comunes se encuentran las aproximaciones demasiado rápidas o altas y olvidar solicitar autorización de la torre de control de tráfico aérea antes de descender de altitud.
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De acuerdo con el vicepresidente del Instituto Air Safety de la Asociación de Dueños de Aeronaves y Pilotos, Richard G. McSpadden Jr:
La clave de volar seguro es la frecuencia. No eres igual de perspicaz si no has volado por un tiempo”
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) reportó un incrementó en las aproximaciones inestables, estas ocurren cuando debajo de 1,000 ft., sobre el terreno se exceden ciertas limitaciones o rangos de referencia. La cifra pasó de 13-14 por cada mil vuelos, a 35 por cada 1,000 a mitad del año pasado.
Con el inicio de la pandemia y las restricciones que trajo con ella, las aerolíneas han reducido drásticamente su número de vuelos diarios. En abril y mayo del 2020, el número de despegues diarios en Estados Unidos cayó un 75%. Actualmente, los niveles se encuentran en un 43% respecto a los niveles pre-pandemia.
Para garantizar que los pilotos en ese país mantengan sus habilidades, aun cuando no estén programados para trabajar por largos periodos, la FAA les prohíbe que vuelen un avión comercial, a menos que hayan realizado tres despegues y tres aterrizajes -en un avión o en un simulador- en los últimos 90 días. Pero las cosas han cambiado con el COVID-19.
Ahora, aquellos pilotos que no hayan cumplido con este requisito antes septiembre del 2020, cuentan con 60 días más de gracia. Además, quienes no han cumplido el requerimiento antes del 31 de diciembre, también recibirán 30 días de gracia.
En México, afortunadamente casi todas las aerolíneas se acercan a sus números pre-pandemia, ayudando a que los pilotos se mantengan activos. Sin embargo, la falta de actividad y regulación por parte de las autoridades -justificado por un apego a los semáforos epidemiológicos- ha permitido que pilotos y demás tripulantes, puedan volar sin un examen médico ni cursos periódicos recientes.
La seguridad de la aviación depende en buena parte del buen funcionamiento de sus organismos reguladores. Cuando estos no trabajan al cien por ciento de su capacidad -como una actividad verdaderamente esencial requiere- se eleva el riesgo de que suceda un infortunio. Para quien escribe estas líneas, el funcionamiento en México, comparado con otros países igual de golpeados por la pandemia, ha dejado mucho que desear.