La Unión Europea suaviza las sanciones contra las aerolíneas rusas

El Consejo Europeo, máxima institución de representación política de la Unión Europea (UE), que reúne a los jefes de Estado de los países miembros del bloque, anunció durante el séptimo paquete de sanciones a Rusia por la invasión criminal a Ucrania que permitirá el suministro de bienes y servicios a las aerolíneas rusas, siempre que sea necesario para “salvaguardar el trabajo de establecimiento de normas técnicas industriales y de seguridad” establecido por los anexos de la Organización de Aviación Civil Internacional (ICAO). 

Según Bruselas, la asistencia técnica al sector de la aviación rusa no violará ninguna de las sanciones de la Unión Europea, y señaló que todavía se permiten algunos tipos de negocios con Rusia, a pesar de las sanciones económicas que el bloque impuso a Rusia por la agresión contra Ucrania. Los detalles de cuáles serán estos bienes y servicios autorizados para exportación a las aerolíneas rusas, sin embargo, recién se darán a conocer con la publicación de las medidas del nuevo paquete de sanciones en el Diario Oficial de la Unión Europea.  

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El nuevo paquete también exime a los sectores de alimentos, farmacéutico y energía, especialmente el petróleo, de sanciones para garantizar la seguridad alimentaria y energética en todo el mundo. El comercio “de productos agrícolas y alimenticios, incluyendo el trigo y los fertilizantes” entre Rusia y cualquier país tampoco será afectado por las sanciones “de ninguna manera”, dijo Bruselas. Así, los países no pertenecientes a la Unión Europea y sus ciudadanos también pueden comprar o vender cualquier producto farmacéutico o médico a Rusia sin temor a sanciones, añadió. 

Sin embargo, a pesar de aliviar la presión sobre los sectores mencionados, impuso duras sanciones a otros sectores estratégicos e importantes para la economía rusa, como la prohibición de comprar, vender y comerciar con oro, además de autorizar el congelamiento de todos los activos de Sberbank, el mayor banco internacional y acreedor de Rusia. Las sanciones también ampliaron la lista de “elementos controlados” que, según Bruselas, “pueden contribuir a la mejora militar y tecnológica de Rusia o al desarrollo de su sector de defensa y seguridad”, ampliando la prohibición de acceso a los puertos para los barcos rusos.

Es importante señalar que, desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania en febrero, existe preocupación por la seguridad aérea en el país, ya que las sanciones han prohibido el suministro de todo tipo de repuestos y servicios de mantenimiento a la flota comercial rusa, que hoy en día se compone principalmente de aviones de fabricantes occidentales, como Airbus, Boeing, Embraer y de Havilland (Bombardier). Para tratar de sortear este problema, que ya está causando dolor de cabeza a las aerolíneas rusas, el gobierno autorizó la producción doméstica de componentes aeronáuticos, es decir, la falsificación, que está prohibida por las normas internacionales de la ICAO por el riesgo a la seguridad.